El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el mitin en Sevilla

El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el mitin en SevillaFrancisco J. Olmo | Europa Press

Mitin en Sevilla

Sánchez presume de «convivencia» en Cataluña tras cargarse el delito de sedición

El presidente del Gobierno censura el plan provida de la «coalición del miedo» en Castilla y León

Por mucho que Sánchez debilite el Código Penal y las instituciones del Estado de derecho español, la culpa de los males de España siempre será de la derecha. Ésta es la tesis del presidente del Gobierno, que este sábado, en teoría, debía ceder el protagonismo al alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, en el acto de presentación de su candidatura para las municipales del próximo 28 de mayo.

Sevilla es la alcaldía más importante del PSOE en Andalucía; una plaza fundamental que mantener para la organización del puño y la rosa el 28-M y para Ferraz y la Moncloa de cara a las generales. Consciente de ello, Pedro Sánchez, así como el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas; el vicepresidente primero del Congreso, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, y varios de los ministros socialistas de su Gobierno, ha arropado a un Antonio Muñoz que, como ha hecho él posteriormente, ha cargado contra la derecha y el PP.

En primer lugar, Sánchez ha destacado la «declaración de amor y compromiso» de Muñoz con Sevilla, así como las cartas de agradecimiento que, según él, recibe semanalmente. Hasta aquí la presentación de la candidatura del regidor hispalense.

A continuación, el presidente del Gobierno se ha referido, aunque con otras palabras, al golpe de Estado separatista de 2017 y ha defendido «la convivencia frente a la confrontación» que supuestamente hay desde que él está en la Moncloa. Ni una palabra, no obstante, del debilitamiento del Código Penal que ha provocado la derogación del delito de sedición y la rebaja de las penas por malversación y que permite a los golpistas ser, simplemente, unos alborotadores públicos.

Del mismo modo, Sánchez ha sacado pecho por la subida del salario mínimo interprofesional y las pensiones conforme al IPC, y también por «apostar» por la sanidad pública. «Todo eso es el Partido Socialista», ha afirmado el secretario general del PSOE federal, que, en este sentido, ha señalado que lo que es «el éxito de la mayoría» supone «el fracaso de los mismos, los del ‘cuanto peor, mejor’».

Autocomplacencia

Sánchez ha hablado, además, de «crecimiento económico» y de tasas de desempleo «relativamente bajas» en España; algo que, de ser cierto, habría sido posible «gracias a la acción del Gobierno de España», que ha aprobado una reforma laboral que ha disparado «un 232 % la contratación indefinida».

Los «derechos de las mujeres» también han estado presentado en su alocución. Al respecto, Sánchez ha aludido al plan provida del Gobierno de Castilla y León, al que el líder socialista ha llamado «coalición del miedo». «La derecha sabe el camino que ha tomado, y es el que le marca la ultraderecha», ha apuntado, para terminar.

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