José Luis Sanz: «Pedro Sánchez es capaz de vender su alma al diablo con tal de mantenerse en el poder»

Tomó el bastón de mando de Sevilla el pasado 17 de junio, después de imponerse al PSOE y al hasta ese día alcalde, Antonio Muñoz, en unas apretadas elecciones que lo hacen gobernar ahora en minoría, circunstancia que lo obliga ahora a negociar los presupuestos con el resto de los grupos municipales. En cuatro meses no le ha dado tiempo a revertir ocho años de socialismo, pero aspira a una ciudad más segura y limpia y mejor dotada de infraestructuras al final de su mandato.

–Este pasado fin de semana destrozaron la histórica cruz de la plaza de Santa Marta. ¿Cómo avanza la investigación sobre lo sucedido?

–De momento, no hay ningún sospechoso. Desgraciadamente, en esta ciudad hay muy pocas cámaras de videovigilancia. Yo espero que con el próximo presupuesto se incrementen las zonas de videovigilancia en la ciudad de Sevilla. Este Ayuntamiento no va a consentir que haya vándalos que un fin de semana destrocen la glorieta de Bécquer, en el parque de María Luisa, y otro, la cruz de la plaza de Santa Marta. Si son turistas, sobra ese tipo de turistas en la ciudad de Sevilla, y si son vecinos de Sevilla, tienen que hacérselo mirar un poquito.

–La falta de seguridad es un problema cada vez mayor en Sevilla. ¿A qué se debe?

–En Sevilla hay tres circunstancias que provocan que la tasa de criminalidad suba año tras año. Primero, faltan 500 policías locales. Nosotros ya hemos firmado 70 plazas en el primer mes, pero todavía faltan 400 y pico de plazas. Segundo, faltan otras tantas de policías nacionales. Estamos hablando de casi mil efectivos, que en una ciudad como Sevilla se notan mucho. Y tercero, en estos últimos años no se ha invertido nada en crear zonas de videovigilancia para incrementar la seguridad en rincones como éste o en aquellos que a determinadas horas se quedan muy solos.

–Afirma que en Sevilla hacen falta más policías locales y nacionales. Hasta que lleguen, ¿qué soluciones plantea a corto plazo para incrementar la seguridad?

–Hasta que lleguen, gestionar muy bien la Policía Local. Por eso hemos hecho cambios sustanciales en la Policía Local de Sevilla. Hemos puesto un jefe que es policía local, que conoce la plantilla, que es de Sevilla y conoce la problemática de la ciudad y que sabe cómo afrontar los problemas de la plantilla y de la ciudad. Por supuesto, tenemos la colaboración total de la Policía Nacional, pero también le faltan efectivos.

En cuatro meses no vamos a solucionar los problemas que ha creado el Partido Socialista en ocho años

–La Policía Local reclama más y mejores medios para realizar su trabajo, así como mejoras retributivas. ¿Qué está haciendo su equipo de gobierno al respecto?

–Primero, puse a un jefe de la Policía Local que es policía local y conoce la problemática de la plantilla y de la ciudad. Se va a duplicar el turno de noche. Se están licitando nuevos equipamientos, como la pistola táser con sus correspondientes cursos de formación. Se pagarán en esta nómina de octubre los retrasos de las productividades y las horas extra de la Feria y de la Semana Santa. Hemos puesto en marcha el programa 'Agente Tutor' en los colegios. Se está reorganizando el Grupo Diana y el Grupo Giralda.

Estamos poniendo las bases para que la Policía Local funcione de una forma mucho más eficiente, pero evidentemente en cuatro meses no vamos a solucionar los problemas que ha creado el Partido Socialista en ocho años.

–¿Qué medidas piensa tomar sobre el arbolado de Sevilla tras el caos generado hace unos días por el temporal?

―Sevilla cuenta con un patrimonio verde inmenso, que forma parte de su idiosincrasia. Por tanto, cada árbol que se ha caído se replantará. Lo que ocurrió hace unos días fue algo imprevisible, pero sí habría que estudiar en algunas zonas por qué han pasado algunas cosas. No tiene sentido que árboles nuevos se caigan todos en una misma calle. A lo mejor es por alguna obra que se hizo mal o algunas plantaciones que se hicieron mal en el pasado.

–En una pasada entrevista con El Debate dijo que en Sevilla lo más urgente era la limpieza. ¿Sevilla está más limpia que cuando llegó a la Alcaldía?

–Sólo un poquito más. La empresa de limpieza que tenemos en estos momentos es la misma que nos encontramos. La única diferencia es que está mejor organizada, mejor gestionada y que planifica mejor los servicios. Sí es verdad que en esta última semana han entrado 200 nuevas personas y que ya se están planificando las inversiones que hacen falta en nueva maquinaria.

Pero, bueno, con la misma empresa, hemos conseguido que la ciudad esté un poquito más limpia, cosa que hay que agradecer no sólo a una buena organización por parte de la Gerencia, sino también a una gran plantilla que en un verano complicado ha hecho un grandísimo trabajo. Se nota un poquito de mejoría, pero todavía queda mucho.

–Según su propuesta de ordenanzas fiscales para 2024, habrá una bajada generalizada de los impuestos locales, una congelación de la mayorías de las tasas y precios públicos, y más y mejores bonificaciones tributarias, todo ello para estimular la economía local y dejar el dinero en el bolsillo de los sevillanos. ¿Podría cuantificar el ahorro estimado para el ciudadano?

–Está cuantificado en cuatro millones de euros, aunque sí es verdad que los impuestos sólo bajan un 1 %. Nuestro proyecto es seguir bajando los impuestos a lo largo de este mandato. Hay otras tasas que hemos incorporado que suponen un ingreso importante para el Ayuntamiento, como por ejemplo la tasa de telefonía móvil, que están cobrando ya ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza o Bilbao, y que Sevilla incomprensiblemente no ha cobrado. Esa tasa va a suponer que las grandes compañías de telefonía tengan que pagar al Ayuntamiento algo más de cinco millones de euros.

Si el sector no lo ve claro, yo no voy a imponer ninguna tasa turística

–Hablando de tasas, el sector turístico no es muy partidario de aplicar una tasa a los visitantes. ¿Desecha usted, así, la idea de una tasa turística en Sevilla?

–Yo siempre he dicho que soy partidario de la tasa siempre que se den tres condicionantes. Primero, que el sector lo pida, no como una imposición. Segundo, que tengamos claro quién la recauda. Y tercero, que sea una tasa finalista, que sepamos perfectamente a dónde va ese dinero que se recauda. Volviendo al primer condicionante, si el sector no lo ve claro, yo no voy a imponer ninguna tasa turística.

–Emasesa –la empresa de aguas metropolitana– ha subido las tarifas del agua para los próximos dos años. ¿No había otra alternativa para compensar las pérdidas previstas por la sequía?

―El problema de Emasesa es que no se actualizaban las tarifas desde el año 2013 y que el coste de su servicio se ha incrementado mucho por culpa de la sequía, porque el agua está en el fondo de los pantanos, mucho más cerca del fango, y el tratamiento del agua se encarece mucho. Pero quiero recordar que el metro cúbico más barato de la provincia de Sevilla es el que cobra Emasesa. El de Aljarafesa es más caro, y el de la empresa del Huesna, también.

–Ha acordado con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, retomar los trabajos de la ley de capitalidad antes de final de año. ¿Es una llamada de atención a Pedro Sánchez?

–Yo no quiero entrar en polémicas con la ley de capitalidad. El presidente de la Junta de Andalucía va a cumplir su palabra, que consistió en crear una mesa de trabajo que se va a reunir a finales de este año para poner negro sobre blanco lo que le supone la ley de capitalidad a la ciudad de Sevilla, que todavía no sabemos en qué consiste. Pero hasta que llegue esa ley de capitalidad, hay otras cosas que se pueden reivindicar, como por ejemplo que el Gobierno de la Nación, sea el que sea, mejore la financiación de los ayuntamientos.

Segundo, a mí me gustaría que el esfuerzo inversor que está haciendo la Junta de Andalucía en la ciudad de Sevilla lo haga también el Gobierno. Igual que la Junta está en la Ciudad de la Justicia, el Hospital Militar, el hospital maternal de Cartuja o el metro, a mí me gustaría tener un Gobierno de la Nación que estuviera en la SE-40, cerrando la línea de cercanías o en la conexión aeropuerto-Santa Justa.

–¿Hay diálogo fluido, como se suele decir ahora, entre el Ayuntamiento de Sevilla y el Gobierno de España para reactivar estos proyectos?

–No, porque tenemos en estos momentos un Gobierno en funciones y no sabemos si seguirá o no. Yo creo que sí, porque Pedro Sánchez ha demostrado muchas veces que es capaz de vender su alma al diablo con tal de mantenerse en el poder. Pero a la espera de que haya un Gobierno que tome posesión y una ministra de Transportes a la que yo pueda dirigirme, creo que no es estético ponerme desde ya a hacer reclamaciones. Evidentemente, este alcalde será muy visceral y beligerante para reclamar ese déficit de infraestructuras que tiene la ciudad de Sevilla.

–¿Teme algún encontronazo con su compañero Paco de la Torre? El alcalde de Málaga, ya fuera con alcaldes del PSOE o del PP en Sevilla, siempre se ha mostrado muy contrario a una ley de capitalidad para Sevilla.

–Málaga es una magnífica ciudad, otro de los grandes motores económicos de nuestra tierra, y el tándem Málaga-Sevilla tiene que funcionar para que nuestra tierra se consolide como la locomotora económica de nuestro país. Yo no creo que sea incompatible una ley de capitalidad para Sevilla con el día a día de Málaga, en absoluto.

A Sevilla le viene mucho mejor un gobierno en minoría del PP que un gobierno en coalición

–Vox le exige participar del gobierno municipal, tener cuota de poder, para apoyar los presupuestos de 2024. ¿Tiene algún inconveniente en que Vox entre en su equipo de gobierno?

–No es inconveniente, es que yo estoy convencido de que a esta ciudad le viene mucho mejor un gobierno en minoría del PP que un gobierno en coalición. Los ciudadanos han votado un cambio político en la ciudad de Sevilla, y creo que también nos han pedido a todos generosidad para que seamos capaces de ceder en los presupuestos, que es el proceso en el que vamos a entrar la semana que viene.

Voy a convocar una ronda de portavoces y presentar un primer borrador de presupuestos y estoy abierto a que cualquier portavoz –de Podemos, Vox o el Partido Socialista– nos plantee cualquier propuesta que quiera incluir en los presupuestos. Creo que van a ser unos presupuestos muy básicos, en el buen sentido de la palabra, porque van a ser unos presupuestos para que esta ciudad vuelva a funcionar en limpieza, movilidad, transporte público, seguridad ciudadana, barrios de atención preferente…, con mejoras que puede votar cualquier fuerza política independientemente de su ideología.