Las desaladoras marcan el camino de la lucha contra la sequía en Andalucía

La sequía que asola actualmente España y muy especialmente Andalucía obliga a buscar alternativas que garanticen el abastecimiento de agua tanto para uso doméstico como agrícola e industrial. Una de esas alternativas son las desaladoras. La obtención de agua desalada es una práctica muy común en España, que cuenta con más de 750 plantas desaladoras en todo su territorio.

Almería es la provincia más seca de España y también la mejor preparada para combatir la sequía en Andalucía, ya que es la que dispone de más plantas de desalación de agua en la región. De hecho, junto con Málaga, acapara la práctica totalidad de las desaladoras andaluzas, como las de Carboneras o el Campo de Dalías (El Ejido), ambas gestionadas por la empresa pública Acuamed y que producen unos 40 y 30 hectómetros cúbicos anuales, respectivamente.

En la provincia de Almería también se encuentra otra planta gestionada por Acuamed en el Bajo Almanzora, pero fuera de servicio tras una riada en 2012. Se espera que esté de nuevo operativa en 2024 y que aporte 20 hectómetros cúbicos más de agua. Alrededor de 15 hm³ produce otra que hay en Almería capital y que es de gestión municipal.

Entre estas instalaciones públicas y otras de carácter privado de menor envergadura, la provincia de Almería dispone actualmente de unos 85 hectómetros cúbicos de agua desalada, según los cálculos de la Mesa del Agua. Este volumen hídrico debería aumentar en un 150 % para el horizonte de 2030 de manera que puedan asumirse las necesidades tanto de la agricultura como de abastecimiento urbano de la costa.

Málaga, agua de mar y agua salobre

En el caso de la provincia de Málaga, la principal desaladora se encuentra en Marbella. Está gestionada por Acosol y es capaz de producir más 15 hectómetros cúbicos de agua al año. La Fundación Aquae también incluye en su clasificación de plantas más importantes a la desalobradora (de agua salobre, no de mar) de El Atabal, ubicada en la capital, operada por Emasa y capaz de producir unos 70 hm³ anuales.

En la provincia malagueña, una de las infraestructuras más esperadas es la desaladora de la Axarquía, esperanza de la comarca para dar respuesta a la necesidad de sus municipios y sus sectores productivos, vinculados al importante cultivo de subtropicales. El Gobierno andaluz instalará desaladoras portátiles tanto en Marbella como en la Axarquía para asegurar el abastecimiento, con entre cuatro y cinco hectómetros cúbicos más de agua al año.

Según datos de Acuamed, las plantas de Carboneras, Campo de Dalías y Marbella aportan actualmente 87 hectómetros cúbicos al año entre las tres, mientras que la de agua salobre, en El Atabal, produce 58 hm³. En este momento, entre las actuaciones encomendadas a Acuamed están la mejora de la eficiencia de Marbella y Carboneras, la ampliación de producción de Campo de Dalías en más de diez hectómetros y la instalación de un bastidor más en Bajo Almanzora, una vez que vuelva a estar operativa.