Sequía
Moreno reclama al Gobierno un plan nacional contra la sequía con las mismas medidas en Cataluña y Andalucía
El presidente andaluz afirma que no consentirá un «trato diferente» en un tema «tan sensible» como la sequía
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha demandado este viernes al Gobierno central un plan nacional «ambicioso» de medidas contra la sequía que se pongan en marcha de manera urgente y ha planteado que lo mismo que se conceda o haga en Cataluña en el ámbito de las políticas hídricas las reciba también la comunidad andaluza.
En una comparecencia ante los medios de comunicación en Jaén, Moreno ha insistido en su disposición a hablar y a llegar a acuerdos con el Gobierno central en la adopción de medidas para hacer frente a la sequía, pero ha advertido de que no va a permitir que haya tratos «diferentes» para unas y otras comunidades.
«Lo que pido es que el Gobierno central haga un paquete de medidas ambicioso, extraordinario e inminente para que podamos empezar a trabajar por la vía de urgencia y, por supuesto, que cualquier cosa que haga en Cataluña, en el ámbito de las políticas hídricas, exactamente igual las tiene que hacer en Andalucía», ha dicho Moreno.
«Yo quiero buen rollo y quiero llevarme bien, pero lo que no voy a permitir bajo ningún concepto es que haya un trato diferente en un tema tan sensible como el agua en un territorio sobre otro territorio porque somos españoles todos y todos tenemos los mismos derechos y las mismas garantías», según ha añadido el presidente andaluz.
Ha indicado que el Gobierno central, responsable del 67 % de las políticas hídricas en Andalucía a través de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), tiene pleno conocimiento de las necesidades en materia de obras, y ha apuntado que, de hecho, hay 30 obras de interés general que el Estado tiene que hacer y que todavía no se han comenzado.
Moreno ha considerado que se debería establecer un cronograma sobre las actuaciones que se deben poner en marcha y que no son sólo transferencias de agua, sino también desaladoras, reutilización de aguas, canalizaciones y pantanos.
En su opinión, el Gobierno tiene que entender que Andalucía se está jugando su «presente y futuro» y que sin agua no puede funcionar y que España, sin Andalucía, «no puede funcionar».
Juanma Moreno ha recalcado, a continuación, que no tiene ningún problema en hacerle llegar a la vicepresidenta Tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, «punto por punto», cada una de las peticiones de la Junta.
Restricciones de agua
Respecto a cuándo podrían llegar las restricciones en el abastecimiento de agua si no lloviera en cantidad en los próximos meses, el presidente ha expuesto que para evitar restricciones en las grandes ciudades a partir de julio, tendría que llover en torno a entre 500 y 600 litros por metro cuadrado, confiando en que esas lluvias también se produzcan en los meses de marzo y abril, más propensos a ello. Con unos 300 litros por metro cuadrado, según ha apuntado, también se podría «salvar» el verano.
«Si no lloviese ya nada septiembre, octubre y noviembre, entonces nos cortamos las venas de manera colectiva porque yo ya no sé lo que hacer», ha expresado el presidente en tono distendido, apuntando que las obras hídricas que se están haciendo son muy lentas y carísimas, y la sequía va mucho más rápida que dichas infraestructuras.
Según ha añadido, si no lloviera nada, nos pondríamos en el «peor escenario posible» y habría que recurrir a la medida de traer barcos con agua para el abastecimiento de la población.
En cuanto a si podría haber restricciones generalizadas durante la época de fiestas de primavera en Andalucía, como la Semana Santa o la Feria de Abril, el presidente ha querido mandar un «mensaje tranquilizador» porque «no vamos a tener ningún problema de suministro de agua en el ámbito urbano».
Ha indicado que otra cosa es que haya restricciones en el ámbito agrario o en algunas zonas industriales, pero de aquí a las grandes fiestas de primavera, el suministro está «absolutamente garantizado» en las grandes ciudades.