El Gobierno de Moreno redobla su ofensiva contra Sánchez a cuenta del cupo catalán

El cupo catalán, como se ha venido a llamar esa financiación «singular» para Cataluña de la que tanto se ha hablado en los últimos meses y que finalmente han pactado los socialistas con Esquerra como prebenda por la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalidad, supone un ataque más contra la igualdad entre españoles y, de manera particular, un nuevo agravio contra Andalucía, una de las regiones infrafinanciadas por culpa de actual modelo de reparto autonómico.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, alertó el pasado viernes de que el cupo catalán, que supondrá la cesión de todos los impuestos a la Generalidad de Cataluña, en lo que se refiere a su gestión, recaudación, liquidación e inspección, trae consigo un cambio de modelo de Estado hacia una España confederal y asimétrica, donde habrá españoles de primera y de segunda.

Esta situación hará que, a partir de septiembre, Moreno se ponga al frente de la movilización social contra el cupo catalán y a favor de una financiación justa para todas las autonomías, el principal caballo de batalla del Gobierno andaluz ante Pedro Sánchez y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de quien precisamente tomó el testigo de dicha reivindicación.

Juanma Moreno ha apelado al espíritu de la España de 1977 para llamar a los andaluces a protestar contra el cupo fiscal para Cataluña. «Los andaluces dieron la cara en la década de los 70 para que hubiera café para todos, para que todos los españoles fuéramos iguales, y volveremos a salir a la calle para reivindicar exactamente lo mismo en el siglo XXI si el Gobierno no da marcha atrás», afirmó Moreno.

La portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, confirmó ayer lunes la intención de Juanma Moreno de movilizar a los andaluces contra el cupo catalán, que supone «un trato de favor al independentismo, a Cataluña, en detrimento del resto de las comunidades autónomas, en especial de Andalucía». «Es una auténtica barbaridad que rompe todas las líneas rojas. Está rompiendo el modelo de Estado y el consenso constitucional de 1978», agregó.

Andalucía, que recibió 1.522,74 millones de euros menos de financiación que la media en 2022, será una de las regiones más perjudicadas por el cupo catalán, que necesita de una reforma integral de las leyes que regulan la financiación autonómica en el Congreso de los Diputados, donde Sánchez necesitará la misma mayoría que en su investidura para que salga adelante.