Granada
La pastelería de Granada con los mejores dulces al más puro estilo neoyorkino que «están pa llorarle»
Si tu pasión son las tartas de queso, los brownies o las galletas al más puro estilo americano y todavía no conoces el mejor sitio de Granada, te recomiendo que no sigas leyendo
dicen que los dulces alegran el alma y que, cuando nos comemos uno, segregamos hormonas de la felicidad que ayudan a calmar nuestro sistema nervioso. Eso es lo que le pasa a muchas de las personas que se acercan cada día hasta la pastelería de Granada 'Estapallorarle', un lugar situado en la calle Trucha, número 5, del barrio de la Chana. Nada más entrar por sus puertas ves las vitrinas con una amplia gama de dulces de inspiración americana y, justo a tu derecha, un cristal que te permite ver cómo hacen los dulces caseros que te teletransportan a la Gran Manzana.
Hablamos con Manmen Molina, la repostera y propietaria de este negocio al más puro estilo neoyorkino.
— ¿Cómo nace 'Estapallorarle'?
— Quien me inició en el tema de la repostería fue mi abuela materna. Al principio era un hobby, pero justo antes del confinamiento hice un viaje a Nueva York y conocí unas famosas galletas, que me hicieron decantarme por el tipo de pastelería que yo quería crear. Durante el confinamiento, dediqué mi tiempo a elaborar mi receta propia, haciendo todo tipo de modificaciones, para que se pareciera a la que yo había probado en América. Cuando la tuve, se las di a probar a mis familiares y mi abuelo me dijo: «esto está pa llorarle» y de ahí surgió el nombre de nuestro negocio, que abrimos hace ya hace 3 años, el 13 de noviembre de 2021.
— ¿Qué fue lo que te hizo engancharte a la repostería?
— Yo era esteticista, pero la vida me fue guiando por la belleza de la pastelería, ya que me encantaba meterme en la cocina y elaborar productos caseros 100 % con ingredientes de calidad y ver como los disfrutaban las personas que los probaban. Esta profesión me hizo descubrir la magia de poder hacer feliz a los demás, que me encanta, y me hizo querer ser pastelera a tiempo completo.
— Empezaste haciendo las típicas cookies americanas y después ampliaste a otro tipo de productos, todos ellos de inspiración neoyorkina. ¿De dónde viene la inspiración?
— Mi inspiración viene de hacerme preguntas como: ¿qué es lo que me comería yo ahora mismo? Empecé con la receta de las galletas, pero en una reunión con amigos decidí hacer un brownie de kínder bueno y, desde entonces, no puede faltar en nuestra pastelería. Mucha gente nos pregunta ¿cuál es nuestro producto estrella? Y no puedo quedarme con uno, ya que tenemos desde rollos de canela, galletas, brownies o una amplia gama de tartas de queso con muchos sabores. Al final, cada cliente tiene su producto preferido.
Mi gran sueño e ilusión es seguir viendo a la gente comerse uno de mis dulces y que me sigan diciendo «guau»
— Además, has creado una comunidad en Instagram que cuenta ya con 11,4 mil seguidores.
— Yo comencé en Instagram gracias a mi marido, pero se ha convertido en mi perfil profesional en el que cuento mi día a día, en el que intento dar un trato cercano y contar mis asuntos diarios, como alguna batalla de autónomos. También te digo que si yo abro la puerta por las tardes y no entran clientes, yo no quiero más de 11 mil seguidores. Lo que más feliz me hace es que vengan personas, prueben mis productos y ver sus caras de felicidad.
— ¿Cuál es tu mayor ilusión de cara al futuro?
— Mi gran sueño e ilusión es seguir viendo a la gente comerse uno de mis dulces y que me sigan diciendo «guau». Yo he abierto mi negocio porque quiero que seamos una familia y que sea la pastelería de nuestra vida.
Algo que con su pasión, buen hacer y cariño en lo que pone, estamos seguro que continuará haciendo, porque, como sus clientes nos dicen, cuando se acercan a la pastelería se llevan un pedacito del alma de Manmen al corazón de sus casas.