El futbolista Luis Suárez, acusado de una presunta agresión a su exmujer

La violencia de género sigue siendo una lacra que también salpica a conocidas figuras del deporte. El último caso que ha saltado a la luz pública es el de Luis Súarez, el delantero colombiano de la Unión Deportiva Almería.

Según se ha conocido ahora, el pasado 11 de diciembre, el ariete fue detenido por la Policía Nacional de la capital almeriense, por presuntamente agredir y vejar a su exmujer durante buena parte de los cinco años que estuvieron casados, según ha publicado el periódico local Ideal. Esto implica que los hechos se habrían producido durante su etapa como jugador en el Granada CF y en la UD Almería.

Luis Suárez acudió a la comisaría con su abogada y, tras negarse a declarar ante la Policía, fue arrestado y obligado a comparecer en un juzgado de Violencia Sobre la Mujer, donde negó las acusaciones que se le imputaban. El futbolista ha quedado en libertad sin fianza, pero tiene la obligación de estar a disposición judicial en todo momento y de comunicar cualquier cambio de domicilio.

Este caso se encuentra ya en manos de una juez de violencia de género de Granada, que es la que se está encargando de la investigación y de adoptar las medidas que estime oportunas con respecto al acusado.

Denuncia ante Guardia Civil de Granada

La denuncia por parte de la exmujer del delantero colombiano se produjo el día 4 de diciembre ante la Guardia Civil de Granada, provincia en la que ella reside actualmente. La víctima relató ante los agentes de la Benemérita que su exmarido la sometía a un control constante y que, presuntamente, llegó a forzarla a mantener relaciones sexuales y a encerrarla en casa cuando él se iba a entrenar.

Todos estos episodios los sufrió presuntamente la denunciante en los distintos lugares a los que tuvo que desplazarse por los sucesivos fichajes de Luis Suárez, que antes de ser fichado por la UD Almería estuvo en las filas del Granada CF y del Olympique de Marsella.

Al parecer, la exmujer del futbolista decidió denunciar el presunto delito a raíz de una llamada telefónica de Luis Suárez solicitando poder visitar a sus hijos. Esto le generó una situación de pánico, pues temió que el jugador pretendiese llevarse a los menores. Se dirigió entonces al cuartel de la Guardia Civil más próximo, donde presentó la denuncia por violencia de género, relatando lo ocurrido durante los cinco años de matrimonio y solicitando medidas de protección.