Nueva ofensiva contra los pisos turísticos en Málaga: podrán ser prohibidos por las comunidades de vecinos

Continúa la cruzada contra los alojamientos turísticos en la ciudad de Málaga. Aprovechando la tramitación de la Ley Orgánica de medidas de eficiencia en la Justicia y de protección de los consumidores, el Gobierno va a introducir, a través de una enmienda, una modificación a este texto para limitar la proliferación de las viviendas turísticas en España. Así, las comunidades de vecinos, las malagueñas entre ellas, tendrán la capacidad de decidir si permiten o vetan este tipo de inmuebles.

En el caso concreto de Málaga, los más de 39.000 alojamientos turísticos la sitúan como la provincia andaluza con mayor número de este tipo de viviendas, lo que ha puesto en pie de guerra a los vecinos, sobre todo del centro de la ciudad, que se quejan por las consecuencias indeseadas de esta masiva proliferación: la escasez de viviendas para alquiler residencial, la subida de precios de los arrendamientos, las molestias a los vecinos o la expulsión de los malagueños al extrarradio de la ciudad.

Mediante la aprobación de esta normativa, se establece que cuando un individuo pretenda dedicar su vivienda a uso turístico, se le exigirá contar previamente con la aprobación expresa de la comunidad de vecinos a la que pertenezca el inmueble. Este permiso se podrá alcanzar únicamente contando con el voto favorable de las tres quintas partes del total de los propietarios; además, el presidente de dicha comunidad podrá instar al cese del uso turístico de una vivienda que carezca de dicho permiso.

Asimismo, la nueva normativa indica que el propietario de una vivienda turística que no se encuentre registrada o que no haya sido aprobada por el número de vecinos requerido deberá detener su actividad si la comunidad así se lo requiere.

Tal y como se indica en el texto, la norma no tendrá carácter retroactivo y sólo afectará a los pisos que se pongan en marcha tras la aprobación de la enmienda y a los que no estén inscritos en los registros autonómicos de viviendas turísticas.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Urbanismo, ha solicitado a la Junta de Andalucía la cancelación de la inscripción de 1.120 viviendas de uso turístico en el Registro de Turismo de Andalucía (RTA), enmarcando esta acción en las medidas que el propio Consistorio está llevando a cabo para limitar en ciertas zonas de la ciudad la implantación de nuevas viviendas de estas características.

De esta manera, se imponía a los nuevos pisos turísticos que quisieran registrarse en la capital la obligatoriedad de disponer de elementos de acceso y evacuación adecuados e independientes de los del resto del edificio, así como instalaciones de luz, agua, gas y teléfono propias.

Estas 1.120 viviendas rechazas por incumplir la vigente normativa representa, aproximadamente, el 80 % de las casi 1.400 solicitudes cursadas desde que el pasado mes de febrero se aprobase el decreto de la Junta que regulaba estos inmuebles.