'Vivir en casa', el proyecto robótico de ayuda en el hogar para personas dependientes

Nuestra envejecida sociedad cada vez necesita de mejores y más sofisticadas herramientas para tratar de mantener la independencia de las personas mayores tanto tiempo como sea posible, apostando por salvaguardar su calidad de vida, su salud y su seguridad.

El pionero proyecto ‘Vivir en casa’, cien por cien público y liderado por la Facultad de Estudios Sociales y del Trabajo de la Universidad de Málaga (UMA) y la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía, investiga y desarrolla modernas tecnologías para que los usuarios, personas dependientes, puedan permanecer en sus hogares y vivir de manera independiente sin correr riesgos.

Las 15 personas que se encuentran probando este prototipo de ‘vivienda consciente’ en la provincia de Málaga disfrutan ya, entre otras innovaciones, de puertas que se abren a través del teléfono móvil, robots que avisan a los cuidadores o servicios de emergencia en caso de que el usuario sufra una caída o pastilleros inteligentes que controlan las tomas de medicación.

Gracias a la combinación de la robótica y la domótica, se facilita la vida cotidiana de este colectivo, al que no le faltan andadores adaptados, frigoríficos inteligentes para hacer pedidos automáticos, robots sociales o sistemas de geolocalización que miden y alertan sobre los parámetros de salud del usuario.

«El proyecto está teniendo los resultados esperados y esperamos que en las conclusiones finales podamos plantear ese rediseño del proceso de cuidado domiciliario a personas mayores y dependientes con la base de la domótica y la robótica», manifestó la decana de la Facultad de Estudios Sociales y del Trabajo de la Universidad de Málaga, Ana Rosa del Águila, añadiendo que los 15 usuarios que están probando el sistema lo valoran «muy positivamente».

Según José Manuel Ramírez, director del proyecto y presidente del Observatorio Estatal para la Dependencia, una de las herramientas más útiles para los usuarios y que está teniendo una mejor acogida es el detector de luz, que, sólo con poner un pie en el suelo, hace que se encienda un dispositivo led debajo de la cama para evitar que el usuario tropiece cuando se levanta en mitad de la noche. «Si a eso, además, le añadimos que de ahí sacamos un algoritmo predictivo para ver con qué frecuencia va al baño esa persona usuaria, pues entonces estamos haciendo de alguna manera un estudio que permite valorar e intervenir desde la prevención», aseguró.

‘Vivir en casa’ cuenta con una inversión de 2,3 millones de euros, dos de ellos financiados por la Junta de Andalucía con cargo a fondos europeos y la parte restante por la Universidad de Málaga y, tal y como apuntó el decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Málaga, Pablo Lara, es un proyecto que «interesa» al sistema sanitario y «debe ser estratégico y prioritario, tal y como este proyecto lo está demostrando».