Málaga acogerá la sede del nuevo centro andaluz de investigación para emergencias y catástrofes

El paso de la DANA por la provincia de Málaga hace apenas dos meses, con las calles convertidas en ríos, los locales comerciales anegados e infinidad de terrenos agrícolas arrasados, supuso un antes y un después a la hora de valorar qué tipo de respuesta es la idónea para enfrentarse a un temporal de esta categoría.

Es por ello que la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación y la Universidad (UMA) han firmado este mismo lunes un Protocolo General de emergencias que contempla la creación de un centro pionero de investigación para la seguridad, las emergencias y las catástrofes en la región.

La sede de este Observatorio de las Emergencias (OEMERG) se encontrará en la ampliación del campus universitario de Teatinos, donde funcionará, además de como centro de investigación, como un gran laboratorio de experimentación en el que se aplicarán las nuevas tecnologías en emergencias y rescates y se implementarán los avances en cuerpos de seguridad.

Así, las modernas instalaciones, además de promover la investigación y el asesoramiento científico, podrán servir como banco de pruebas de nuevas tecnologías en protocolos de búsqueda y rescate de personas, comunicaciones en emergencias o el empleo de redes 5G y 6G para mejorar la capacidad de respuesta del personal de emergencias.

También tendrá como misión fomentar la autoprotección y la cultura preventiva entre la población y permitirá que miembros de los cuerpos de seguridad y rescate se sirvan de sus instalaciones para simulacros de diferentes situaciones y escenarios.

La firma de este Protocolo General ha reunido al consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el presidente de la Diputación, Francisco Salado; y el rector de la Universidad de Málaga, Teodomiro López.

Antonio Sanz ha querido destacar el carácter «pionero» del Observatorio. «Desde hace unos años podemos decir sin miedo a la exageración ni a equivocarnos que Andalucía está en la primera línea en materia de seguridad y emergencias; así lo atestiguan los hechos y el enorme trabajo desarrollado», tal y como sucedió durante la DANA, «donde la coordinación fue clave para gestionar las emergencias que se presentaron».

Por su parte, el alcalde de la ciudad ha valorado la trascendencia de la inauguración de un «gran laboratorio de experimentación en el que la innovación se ponga al servicio de la intervención y rescate en situaciones de emergencia para mejorar los procedimientos y técnicas e incluso la seguridad de quienes intervienen».

Para de la Torre, esta es una nueva oportunidad para que empresas internacionales muy destacadas del sector de la seguridad puedan venir a las instalaciones de Málaga a probar y desarrollar sus tecnologías, ofreciendo de nuevo una visión de la ciudad como capital de la innovación y el desarrollo.