Llegan a Alcalá los refugiados de países subsaharianos para su acogida temporal hasta final de añoEuropa Press

Sevilla

La intrahistoria de los refugiados de Alcalá de Guadaíra: del mutismo del Gobierno al «miedo» de los vecinos

Ha sido el tema de actualidad del día en la provincia de Sevilla. Sobre las 13 horas de este lunes llegaban al hotel Sandra de Alcalá de Guadaíra dos autobuses con inmigrantes procedentes de países subsaharianos y víctimas de conflictos, que se instalaran de manera temporal en el municipio sevillano bajo los auspicios de la ONG Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), responsable y gestora de esta acogida temporal.

Lo hacían custodiados por un importante despliegue policial y una amplia cobertura de los medios de comunicación, así como la presencia de numerosos vecinos. Se da la circunstancia que el Gobierno central, encargado, a través del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de gestionar las plazas de acogida en España de aquellos que piden derecho de asilo, no había informado ni al Consistorio sevillano ni a la Junta autonómica.

De hecho, el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, en manos de la socialista Ana Isabel Jiménez, que gobierna gracias a un pacto con Andalucía por Sí (AxSí), ha solicitado una reunión con la secretaria de Estado de Inmigración, Pilar Cancela, para exigir información detallada de todo el proceso.

El Consistorio alcalareño ha señalado que va a activar «todos los servicios necesarios para que, de forma general, esta situación no afecte a la convivencia pacífica en el municipio y que quede latente el carácter solidario y el sentido de responsabilidad que siempre han definido a la sociedad alcalareña, demostrada en anteriores acogidas a personas refugiadas procedentes de regiones en situación de conflicto».

«Miedo y preocupación»

El portavoz del Grupo Parlamentario Vox en Andalucía, Manuel Gavira, ha acusado al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, de «ponerle la pulsera del todo incluido» a los inmigrantes que el Ejecutivo ha enviado este lunes a la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), y que, a su juicio, «asaltan nuestras fronteras» en lugar de «expulsarlos».

Gavira ha criticado que «casi 200 inmigrantes ilegales» se hayan enviado al municipio sevillano, donde tienen un «20 % de población desempleada», en una comparecencia donde el partido de la derecha había convocado a los medios delante del Hotel Sandra, donde a partir de este lunes serán acogidos estos casi dos centenares de «ilegales enviados por el Gobierno del PSOE».

«Todos son adultos, corpulentos y han accedido a España de manera ilegal asaltando nuestras fronteras» a través de Canarias, y añade que «ya están generando preocupación, miedo e incertidumbre en los vecinos de Alcalá de Guadaíra, en los comerciantes y en los padres de los alumnos del colegio que está a pocos metros de este hotel».

Efectivamente, sobre los padres de los alumnos del colegio que colinda con el hotel también ha hablado la consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Carmen Castillo, en una entrevista con Canal Sur Radio, para mandar un mensaje de tranquilidad: «Estoy segura de que en la localidad se van a poner todos los medios por parte del Ayuntamiento para que haya una regulación normal de acceso al centro educativo». Más allá de la preocupación que como familia se pueda tener, el colegio es un entorno seguro», ha remarcado.

«El Gobierno no nos informa»

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha expresado este lunes la situación que afronta la comunidad en la recepción y acogida de contingentes de inmigrantes tras esgrimir que «están colapsados ya nuestros centros» por cuanto «tratamos, cuidamos a los menores no acompañados» y, en consecuencia, ha advertido de que «no es fácil poder aguantar mucho tiempo».

​Sobre la llegada de los nuevos inmigrantes a Alcalá, el máximo dirigente andaluz ha advertido de entrada que «no tenemos conocimiento» de esa operación, aunque ha reconocido que «no es la primera vez que ocurre, que el Gobierno no nos informa».

Moreno, quien ha calificado de «pueblo solidario» a la población andaluza ante la llegada de inmigración, ha reclamado en consecuencia a la Administración del Estado «transparencia y financiación», así como que «garantice la seguridad de nuestras fronteras».

El presidente de la Junta ha dado un «sí» a la llegada de migrantes, aunque ha abogado por un modelo de atención que ha calificado como «regular y ordenada», para rechazar seguidamente la «desordenada, la caótica», por lo que ha demandado al Estado el uso de instrumentos, «de una vez por todas», como Frontex.