Imagen del comienzo del juicio al exdirector de la Faffe Fernando Villén y al exacalde de Lebrija EUROPA PRESS 26/9/2024Europa Press

Corrupción

La secretaria del director de la Faffe dice que el exalcalde de Lebrija iba «un par de veces al mes» y previa llamada

La que fuera secretaria de Fernando Villén, ex director general de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), ha testificado en el juicio que se celebra en la Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla que el exalcalde de Lebrija, Antonio Torres García (PSOE), acudía a las dependencias de la Faffe «de vez en cuando, un par de veces al mes».

Este juicio ha sentado en el banquillo a los mencionados Villén y Torres García por posible prevaricación y malversación en la contratación «arbitraria» del exedil, al que se le acusa de haber llegado a cobrar hasta medio millón de euros por «no ir a trabajar» en todos los años que estuvo a sueldo de la Faffe.

Esta testigo ha asegurado que a ella no le consta que Torres García contase con despacho propio en la Faffe, cuyas dependencias visitaba «muy esporádicamente, de vez en cuando, un par de veces al mes». Es más, ha detallado que antes de visitar la sede del organismo, el exalcalde telefoneaba para asegurarse de que Fernando Villén estaba allí.

En paralelo, la secretaria ha explicado al tribunal que ella tuvo la impresión de que el socialista era una persona incluida «en el ámbito» de la Faffe pero desconocía donde trabajaba «físicamente», confirmando el testimonio de Juan Carlos Díaz, antiguo director de Estructuras Permanentes, también investigado en la pieza principal de la macrocausa.

Villén le colocó en la Faffe

La secretaria añadió que el ex primer edil «llevaba» la gestión de un programa que estaba promoviendo entonces la Faffe, para la inserción laboral de militares, una vez los mismos dejaban el servicio activo en las Fuerzas Armadas.

Según el auto de transformación de las diligencias en procedimiento abreviado de este caso, después de que Antonio Torres perdiese el poder en Lebrija en las elecciones municipales de 2003 tras 24 años como alcalde, habría solicitado al entonces director general técnico de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo su «colocación en la Faffe, a lo que Villén accedió promoviendo en su favor un novedoso cargo directivo, inexistente en realidad, que diera satisfacción a las condiciones de contratación indefinida y salario solicitadas» por él.

Todo ello, pese a que Torres García «carecía de formación y aptitudes para asumir funciones correspondientes a dicho nivel profesional» de directivo.

Así, y según el juez instructor, el exalcalde de Lebrija «fue contratado el 1 de julio de 2003 con un contrato de duración temporal, prorrogado y convertido en indefinido con fecha de efectos 1 de diciembre de 2004, como directivo, con una retribución total de 46.750 euros anuales, encontrándose de alta como empleado en la Faffe hasta la extinción de ésta y su integración en mayo de 2011 en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE)».