ERC no quiere que se vea una inscripción sobre la Constitución de Cádiz en un ayuntamiento catalán

«Todo español tiene derecho de representar a las Cortes o al Rey para reclamar la observancia de la Constitución». Este es el artículo 373 de la Constitución de Cádiz, que aparece en la fachada del ayuntamiento de Arenys de Mar (Barcelona), y que el equipo de Gobierno municipal ha tapado con una tela blanca, aunque su objetivo es hacerlo con una pintura especial para «esconderlo», para «proteger» el grabado en cuestión. En ningún caso, dicen desde el Consistorio, gobernado por ERC, se trata de «censura».

¿Y cómo ha aparecido este grabado? ¿Por qué la polémica? Todo ello empezó hace algo más de un año, cuando se descubrieron unas pinturas en la fachada del Ayuntamiento. Tras un análisis comprobaron que se trataban de dos relojes de sol que datan del siglo XVIII. Y bajo uno de estos dos relojes es donde aparece el artículo de la Constitución de 1812. Desde el Museo de Arenys de Mar se celebró que, tras la restauración, finalmente se pudieran descubrir los relojes, para que todo el público pudiera contemplarlos. Pero no así el grabado de 'La Pepa', porque se tapó con la tela blanca, lo que provocó las quejas de algunos ciudadanos del municipio. Esto fue hace sólo algunas semanas.

Una excusa ridícula

Según ha explicado a El Debate el presidente del PP de Arenys de Mar, Juanjo Almansa, el concejal de Cultura llegó a asegurar que, si «por él fuera, taparía con pintura» el grabado. Para ello, convocó a una comisión de expertos de patrimonio del municipio, que, tal y como señala, Almansa, «llegaron a la misma conclusión» y avalaron la propuesta del equipo de Gobierno. Y la excusa que dieron es que de mantener a la vista el artículo constitucional se podrían producir actos vandálicos. A cambio, se comprometieron a colocar una placa en la fachada en la que explicarían «qué había ahí escrito, pero vete a saber tú qué pondrían ellos», precisa Juanjo Almansa. En cualquier caso, se está pendiente del visto bueno, o no, de Patrimonio de la Generalitat, que está estudiando el valor histórico de la inscripción.

Almansa lamenta que se quiere tapar un grabado que demuestra que «en Arenys había gente a favor de la democracia y de la separación de poderes». Pero el problema, añade, es que «el Gobierno independentista vio las palabras Constitución, España y Rey, y eso de que se pueda relacionar lo español con democracia, no lo ven bien». De ahí, asegura, que decidieran taparlo con una tela blanca que además «parece un tendedero, es muy cutre». Como también considera cutre la excusa para no hacer visible el grabado, porque «ya han pasado unas cuantas semanas desde que acabaron los trabajos de restauración y nadie ha tocado la tela».

El historiador César Alcalá explicaba a este diario que no entiende la postura del Ayuntamiento de Arenys. «La verdad es que no molesta en ningún caso», apunta Alcalá, quien también recuerda que una treintena de catalanes, entre ellos Antoni Capmany, «estuvieron en las cortes de Cádiz y aprobaron esa Constitución». El historiador también ha destacado la idea de «modernidad» que supuso 'la Pepa', y no sólo eso, sino que «sirvió para desarrollar el constitucionalismo en América. Todo aquello que aquí en España no se quiso poner en práctica, sirvió como base en América y en Europa, sobre todo a partir de las revoluciones de 1848».

Alcalá lamenta que se quiera «tergiversar la historia o ignorar una parte fundamental, porque si hoy en día hay una serie de libertades, es también porque en 1812 hubo unos señores que intentaron modernizar España. De allí, venimos todos». Además, considera que es crear «un problema donde no lo había» porque se muestra convencido de que mucha gente «no sabía siquiera que existía la inscripción». Y no cree que «se vayan a rasgar las vestiduras por pasar delante del Ayuntamiento y que se esté hablando de derechos, observancia, reyes o constitución».