Política
ERC y PSC pactan un preacuerdo con un concierto económico para Cataluña: «El objetivo es la independencia»
Las bases republicanas votarán el viernes si aceptan o no el pacto, que incluye también un impulso al catalán
Tras una agónica reunión que se ha alargado desde las 9,30 de la mañana, la ejecutiva de ERC ha avalado finalmente este lunes el preacuerdo con el PSC para investir presidente de la Generalitat a Salvador Illa.
El pacto entre socialistas y republicanos se basa en dos pilares: un cambio en el modelo de financiación de Cataluña y un impulso al catalán. Según ha explicado la portavoz republicana, Raquel Sans, el preacuerdo contempla otorgar a Cataluña «la llave de la caja» de la financiación, que se concretaría en que la comunidad saldría del régimen común, recaudaría «el 100% de los impuestos» y pagaría al Estado un porcentaje en concepto de «cuota de solidaridad».
Esto implicaría, ha destacado Sans, una modificación de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) y el impulso a la Agencia Tributaria de Cataluña, con traspaso de funcionarios, según ha deslizado Sans. El primer paso, ha dicho, será la recaudación del IRPF el año 2026. «No pasará de hoy para mañana, pero el calendario está pactado y consensuado con el PSOE», ha adelantado Sans.
«Creemos que es un muy buen preacuerdo, y nos permite estar más preparados de cara al objetivo final, que es la independencia», ha insistido Sans, que también ha adelantado que mañana, martes, darán más detalles sobre los contenidos del pacto.
Impulso al catalán
El segundo gran pilar del preacuerdo, según lo ha presentado Sans es tener «la llave de la nación», la lengua catalana, a la que ha considerado que «le va de uno o dos años» para mantener su «uso social». En este sentido, el preacuerdo contempla la creación de un Departamento de Política Lingüística, así como garantizar que el catalán sea la lengua vehicular en las aulas «frente a la ofensiva judicial», ha dicho.
Sans también ha informado de que el preacuerdo recoge el compromiso de garantizar el uso del catalán también en las actividades extraescolares o en «ámbitos donde va más coja», como la Sanidad.
Además, la portavoz ha anunciado la creación de una «Convención Nacional para la Resolución del Conflicto Político», que incluirá, ha dicho, a todas las fuerzas parlamentarias, y que estará presidida por ERC. Por último, el preacuerdo contempla la continuidad de varias «políticas republicanas» como la gratuidad del curso I2 en las guarderías o la consejería de Igualdad y Feminismos.
Consulta a la militancia
El siguiente paso es que el partido someta el preacuerdo a votación a sus cerca de 8.700 militantes, que validarán o no la decisión a través de una consulta telemática que tendrá lugar este viernes, 2 de agosto.
Será una «consulta vinculante», que tendrá lugar telemáticamente entre las 9 horas y las 20 horas, con una franja entre las 10 y las 15 horas en la que se podrá votar presencialmente en las sedes del partido. En caso de que la militancia rechace el preacuerdo, ha dicho Sans, las negociaciones cesarán.
El resultado de la consulta es la gran incógnita de los próximos días, ya que hay sectores internos en ERC que ven con muy malos ojos la investidura del líder socialista, a quien tildan de «candidato del 155».
División interna
La reunión en la sede de ERC, en la calle Calabria, estaba prevista como un trámite, pero a medida que pasaban las horas se hacía evidente que en la cúpula del partido hay opiniones encontradas. Los líderes republicanos temen que si los dirigentes no dan un apoyo sin fisuras al preacuerdo, este sea más difícil de asumir por sus bases.
Mientras los mandos estaban reunidos en Calabria, además, se han hecho públicas posiciones críticas al preacuerdo por parte de personajes con ascendencia en ERC. El más destacable ha sido el posicionamiento de Pilar Vallugera, diputada de ERC en el Congreso de los Diputados que ha dejado patente en X su rechazo a una investidura de Illa.
Además, aunque desde el partido insisten en que trabajan con agenda propia y no mirando a sus rivales, sobre la votación entre los militantes planea la posibilidad de que un retorno de Carles Puigdemont pensado para dejar en evidencia a ERC como colaboracionistas de al traste con el resultado querido por la cúpula.