Un grupo de participantes en la manifestación de la Diada, este miércoles en Barcelona
Cataluña
El fracaso de la Diada independentista contrasta con las colas para visitar el buque Elcano en Barcelona
Dos estampas contrapuestas este 11 de septiembre ponían de manifiesto la pérdida de influencia del separatismo
Este miércoles se confirmaron los peores pronósticos para el independentismo: apenas 73.500 personas acudieron a las manifestaciones convocadas por toda Cataluña. Barcelona, Lérida, Tarragona, Gerona y Tortosa fueron los escenarios de una concentración «descentralizada» y deslucida, que supuso para el separatismo una pérdida del 36% de asistentes respecto al año pasado, según el recuento de la Guardia Urbana.
El poder de convocatoria de las entidades independentistas convocantes –un grupo liderado por la Asamblea Nacional Catalana y Ómnium Cultural– queda muy lejos del cénit del procés, cuando logró movilizar a 1,8 millones de personas el 11 de septiembre del 2014. Un descenso constante que ha hecho del lema de este año, «volvemos a las calles», una profecía cumplida solo a medias.
En las cinco concentraciones simultáneas no se pudo ver a los principales líderes del independentismo: a Carles Puigdemont, prófugo en Waterloo, no se le esperaba, pero sí había quien buscaba a Marta Rovira u Oriol Junqueras, que no acudieron a las marchas ni a la ofrenda floral que tuvo lugar por la mañana. Con todo, Junts y ERC sí estuvieron presentes en espíritu, tanto en pancartas que afeaban el pacto de los segundos con el socialista Salvador Illa como en los discursos que criticaban las peleas «cainitas» que echaron a perder las mayorías parlamentarias conseguidas por el independentismo.
Éxito del Elcano
Frente al escaso magnetismo de la propuesta independentista, que cada vez encuentra menos adeptos entre la población catalana, según los barómetros del CEO, este miércoles hubo un rincón de Barcelona donde sí se vivieron colas interminables e ilusión: el buque escuela de la Armada Española Juan Sebastián Elcano.
Casi 10.000 personas visitarán el barco durante su estancia en Barcelona, y su comandante, el capitán de navío Luis Carreras-Presas anunció esta semana que tuvieron que colgar el cartel de «no hay entradas» pocas horas después de abrir el plazo. El Juan Sebastián Elcano atracó en el puerto de la capital catalana el pasado 7 de septiembre y estará hasta este sábado día 14.
Este miércoles se podían ver colas frente al buque, tanto de los afortunados que tenían su entrada como de curiosos que iban a probar suerte. «Es muy querido en todos los sitios a los que va», señalaba Carreras-Presas, en referencia a la que es la undécima vez que el célebre barco de la Armada visita Barcelona.
