Comunidad Valenciana  La Justicia investiga por qué no se avisó del peligro que corría el 'tren del pánico'

El Juzgado de Primera Instancia de Segorbe (Castellón) ha abierto una causa para esclarecer lo ocurrido el pasado mes de agosto en el municipio de Bejís, cuando se permitió que un tren llegara sin avisos previos a una zona que estaba siendo devorada por las llamas.

Durante los hechos, varios pasajeros tuvieron que salir del convoy a la desesperada presos del pánico e incluso caminaron varios metros sin rumbo por las vías mientras veían como el incendio estaba a tan solo unos pocos metros.

Algunos de esos viajeros sufrieron quemaduras de diferente consideración y tuvieron que ser trasladados al hospital, donde permanecieron ingresados durante varios días. Por ello, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) ha informado de que el procedimiento judicial abierto en Segorbe es sobre los delitos de lesiones y daños, aunque no ha descartado que según avance la causa a ellos se pueda añadir alguno más.

Asimismo, el Juzgado se ha hecho cargo del sumario, una vez recibido y analizado el conjunto de pruebas e investigaciones por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, si bien por el momento no hay nadie citado a declarar ni bajo la condición de investigado.

Los pasajeros afectados viajaban en el tren que cubría la línea Valencia-Zaragoza, cuando se le permitió salir sin que la maquinista ni ningún responsable de Renfe o Adif tuvieran conocimiento que a pocos kilómetros había un importante incendio, con el agravante de fuertes rachas de viento, que lo hacían más peligroso.

De «responsabilidades» a la «dimisión»

En su comparecencia en el Congreso de los Diputados, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, confirmó que el protocolo indica que, en caso de tener conocimiento de una emergencia como la de Bejís, son los servicios de la Generalitat Valenciana quienes han de ponerlo en conocimiento de Renfe y Adif para que ellos den las instrucciones de cara a interrumpir la circulación ferroviaria.

Ese extremo fue negado por la consejera de Justicia e Interior valenciana, Gabriela Bravo, que no dudó en culpar a los técnicos del Puesto de Mando Avanzado (PMA) que había instalado en la zona del incendio.

Sin embargo, la portavoz del Partido Popular en las Cortes Valencianas, María José Catalá, mostró desde la tribuna de oradores la relación de comunicaciones de aquella tarde en la que se podía comprobar cómo los servicios de Emergencias de la Generalitat sí recibieron el aviso del incendio pero, no obstante, no procedieron a avisar a Renfe ni Adif.

La actuación del Gobierno valenciano, sus explicaciones, así como las peticiones de asunción de responsabilidades han marcado buena parte de la actualidad política autonómica, ya que el presidente de la Comunidad, Ximo Puig, en ningún momento ha querido comparecer en las Cortes para aportar su relato de lo sucedido.

Esto, unido a que únicamente se ha limitado a decir que el tema está «bajo investigación», ha provocado que los tres partidos de la oposición, PP, Ciudadanos y Vox hayan pasado de pedir «responsabilidades» a exigir la «dimisión» del socialista.