El presidente y fundador de la UCAM, José Luis Mendoza, y su esposa, junto al Papa Benedicto XVI
José Luis Mendoza (1949-2023) ¡Vivat Academia!
El fundador y presidente de la Fundación Universidad Católica San Antonio de Murcia, José Luis Mendoza, ha fallecido a los 73 años
José Luis Mendoza Pérez
Entre sus reconocimientos, destaca la distinción de la Orden de San Gregorio Magno que le concedió Joseph Ratzinger a él y su esposa, así como la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice, otorgada por el Papa Francisco
El pasado 18 de enero falleció José Luis Mendoza, presidente y creador de la Fundación Universitaria Católica San Antonio de Murcia (UCAM), a los 73 años.
Casado con María Dolores García y padre de catorce hijos, su reconocida trayectoria vital tuvo como pilares la familia, la fe católica, el mundo universitario y el deporte.
Muestra de ello es que antes de su muerte, Mendoza recibió, según ha señalado la UCAM en un comunicado, la llamada de Su Santidad el Papa Francisco en la que le ofreció «sus oraciones e intercesión».
En ese mismo comunicado, los miembros de la Institución que levantó con pasión se han mostrado «profundamente agradecidos al Señor por el testimonio y la vida de D. José Luis Mendoza Pérez».
Misionero en República Dominicana
En el ámbito académico, fundó la Fundación en 1988 y fue, ya en 1996, cuando se inauguró la Universidad. Desde el primer día, Mendoza fue Presidente y Gran Canciller de la misma, así como de la Fundación Alma Mater de Colegios Católicos.
En al ámbito religioso, la vida de Mendoza también fue profundamente intensa. En 1991 viajó como misionero hasta República Dominicana a petición de San Juan Pablo II. Allí se volcó para colaborar en la creación del Seminario Internacional Redemptoris Mater de Santo Domingo.
Asimismo, formó parte de diversas instituciones como la Pontificia Academia para la Vida, presidió la Fundación Benedicto XVI de Familia y Vida y fue directivo en Madrid del Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para las Ciencias del Matrimonio y la Familia.
José Luis Mendoza, durante uno de sus encuentros con el Papa Benedicto XVI
Entre sus reconocimientos, destaca la distinción de la Orden de San Gregorio Magno que le concedió Joseph Ratzinger a él y su esposa, así como la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice, otorgada por el Papa Francisco.
En lo académico, más allá de su incuestionable legado al frente de la UCAM, Mendoza fue Doctor Honoris Causa por la Facultad de Teología Redemptoris Mater de Lima, en Perú. En este sentido, también organizó numerosos congresos y simposios de carácter internacional.
El mundo del deporte también fue clave para él. De hecho, fue miembro de la Asamblea del Comité Olímpico Español (COE) en representación de los clubes. Como curiosidad, los medallistas y abanderados españoles Mireia Belmonte y Saúl Craviotto pasaron por sus aulas.
«Testigo del amor de Dios»
La huella que deja Mendoza es imborrable y ello se han encargado de recordarlo numerosas personalidades.
El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha calificado al fundador de la UCAM como «una buena persona» y que fue «valiente y honesto». En este sentido, ha asegurado que siempre recordará «su fuerza, constancia e ímpetu para defender aquello en lo que creía».
En esta línea, el delegado del Gobierno en la Región, José Vélez, ha destacado la «bonita relación de amistad» que mantuvo con Mendoza.
Por su parte, el obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, ha definido al difunto como «más que amigo, un hermano, un creyente, un testigo del amor de Dios, que quiso pasar haciendo el bien». ¡Vivat Academia!
