El president de la Generalitat, Carlos Mazón, conversa con el vicepresidente primero, Vicente BarreraEFE/Ana Escobar

Comunidad Valenciana  Vicente Barrera (Vox) se compromete a luchar contra el «pancatalanismo supremacista cultural»

El vicepresidente valenciano ha asegurado que la
​Generalitat no subvencionará a entidades separatistas y asegura que las ayudas públicas se darán mediante criterios culturales y no «ideológicos y lingüísticos»

Las Cortes Valencianas han retomado este miércoles su actividad tras el pleno de investidura del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y de las vacaciones de verano. En estas primeras sesiones los distintos consejeros van compareciendo en la tribuna de oradores para exponer, tanto a petición propia como a la de los grupos parlamentarios de la oposición, para explicar cuáles van a ser las líneas básicas de actuación que implementarán en sus distintos departamentos.

El que antes lo ha hecho ha sido el vicepresidente primero y consejero de Cultura y Deporte, Vicente Barrera, de Vox. En su intervención, el dirigente ha dejado negro sobre blanco que va a emprender una política que en nada se parecerá a la que llevó a cabo el tripartito del PSPV-PSOE, Compromís y Unidas Podemos. Así, entre sus afirmaciones ha destacado la de que se encargará de luchar contra el «pancatalanismo supremacista cultural» que impuso la izquierda desde que accedió al poder a mediados de 2015.

Estas palabras, además, las ha pronunciado en mitad de la polémica provocada por el Gobierno central a cuenta del uso de las lenguas cooficiales y de haber unificado en un mismo idioma el valenciano y el catalán, contraviniendo así no solo los hechos históricos, sino también lo establecido en el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana. Este hecho ha sido el último en producirse, pero forma parte de una notable lista de agravios hacia la región que Barrera ha definido como «suicidio cultural» valenciano.

«Robar» la identidad valenciana

«El catalán no es nuestro idioma», ha recalcado el vicepresidente tras censurar que ese «pancatalanismo supremacista» intenta «convencer» de que sí se habla catalán en las provincias de Castellón, Valencia y Alicante: «Amamos la singular cultura que como comunidad vecina tienen nuestros hermanos catalanes, pero otra cosa es el pancatalanismo cultural que quiere robarnos nuestra identidad valenciana y española y busca separarnos del resto de España», ha apuntado el dirigente de Vox.

En consonancia con lo expresado en diversas ocasiones por Mazón, Barrera ha confirmado que el Ejecutivo de la Generalitat dejará de subvencionar a asociaciones independentistas porque no tiene la «obligación» de hacerlo con «todo». «No vamos a financiar a grupos o entidades que busquen conspirar contra la cultura común española o contra la singular identidad valenciana», ha reiterado.

Al decirlo, el diputado de Compromís Joan Baldoví se ha mostrado indignado, por lo que el consejero le ha espetado que no hacía «falta» que se pusiera a hacer «aspavientos». Al respecto, cabe recordar que la política cultural valenciana de los últimos ocho años ha estado en manos de la formación nacionalista, por lo que tampoco les ha gustado que definiera la entelequia de los ‘Países Catalanes’ como «los Mundos de Narnia».

Vicente Barrera, nuevo vicepresidente de la Comunidad valencianaEFE

Asimismo, y en la línea de marcar distancias con sus antecesores, Barrera ha negado que ni él ni su equipo vayan a ser «sectarios» -paradójicamente se lo recomendó la exconsejera de Compromís- y como ejemplo ha puesto el sector de la tauromaquia. El vicepresidente, que fue torero, ha recordado que su profesión fue «silenciada, ninguneada, maltratada y perseguida» por el socialista Ximo Puig y sus socios nacionalistas y comunistas. Es por eso que ha vuelto a hacer una promesa, en este caso orientada a garantizar el apoyo institucional de la Generalitat a las tradiciones taurinas en la Comunidad, un aspecto que hará extensivo a las religiosas, que también fueron marginadas por el tripartito.

En esa apuesta por la «libertad», el número dos del Ejecutivo de Mazón ha anunciado que, a diferencia de lo que hizo la izquierda, volverán las ayudas públicas a entidades valencianistas como la Real Academia de Cultura Valenciana (RACV) o Lo Rat Penat. Igualmente, su departamento «redefinirá» los baremos para acceder a dichas ayudas, con el objetivo de que dejen de ser «ideológicos y lingüísticos» y se basen en criterios meramente culturales. Con ello se pretende que las empresas editoriales dejen de ser dependientes de los fondos públicos: « Cabe revisar la politización del sector», ha señalado.