El portavoz de Compromís en Las Cortes Valencianas, Joan Baldoví, este juevesJosé Cuéllar / Corts Valencianes

Los casos Erial y Oltra embarran el Pleno de las Cortes Valencianas

PSPV-PSOE y Compromís han tensionado la sesión de control al Consell hasta tal punto que la presidenta del Parlamento ha amagado con suspenderla si no se calmaban los ánimos

La votación de la toma en consideración de la primera gran batería legislativa del Consell del Partido Popular y Vox en la Comunidad Valenciana, con las leyes de Libertad Educativa y de Concordia como punta de lanza, hacía prever una bronca sesión de control al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y a su Gobierno. Y las expectativas han acabado cumpliéndose. El Pleno empezó con buenas palabras y los mejores deseos a la diputada y exvicepresidenta autonómica, Aitana Mas, que días atrás anunció que padecía cáncer, pero pronto ha acabado por torcerse ese clima.

La escenografía y puesta en escena lo ha adelantado, ya que todos los parlamentarios de Compromís han acudido a la Cámara vestidos con ropa negra en señal de 'luto' por las normas que la coalición de centro-derecha iba a sacar adelante. A ello le ha seguido la primera pregunta al jefe del Consell, a cargo del portavoz del PSPV-PSOE, José Muñoz, que ha interpelado al presidente valenciano sobre si considera que el franquismo fue una dictadura.

Poco ha tardado el 'popular' en contestar que «sí». «Léame los labios: sí», ha insistido un Mazón que seguidamente ha enumerado los logros de su Gabinete en los meses que lleva gobernando, a la vez que le ha lanzado un reproche al socialista: «Y a usted solo le interesa Franco».

«Eres una mala persona»

A partir de ese momento, la sesión la han protagonizado el caso Erial, por el que se está juzgando a Eduardo Zaplana por un supuesto caso de corrupción, y el de Oltra. Respecto al primero, el PSPV-PSOE en sus intervenciones ha tratado de equiparar al exministro con el actual presidente de la Generalitat. Sin embargo, como esa estrategia no ha surtido el efecto deseado por el principal partido de la oposición, sus diputados han optado por una nueva sobreactuación. En este caso, se han puesto en pie y han sacado fotografías de valencianos represaliados por Franco.

La siguiente formación en controlar a Mazón ha sido Compromís, que lejos de rebajar el tono, incluso lo ha aumentado. Su síndico, Joan Baldoví, ha comenzado su turno nombrando el caso Oltra, archivado la pasada semana. En este sentido, y tras leer el auto de sobreseimiento del juez, se ha dirigido a las bancadas del PP y Vox y ha lanzado una pregunta: «¿No les da vergüenza?».

Carlos Mazón pide tranquilidad en las Cortes ValencianasCortes Valencianas / José Cuéllar

Ante la respuesta negativa de los 53 representantes de ambas organizaciones, el nacionalista ha fijado la mirada y las palabras en la 'popular' Elena Bastidas, que fue quien la legislatura pasada llevó el peso parlamentario de todo lo relacionado con la exvicepresidenta valenciana y el tratamiento que su Consejería le dio a Maite, la chica que fue víctima de los abusos sexuales del exmarido de la antigua líder de Compromís. «Eres una mala persona», le ha espetado.

De manera inmediata, se ha armado revuelo en el Hemiciclo regional, llegándose a escuchar «un cobarde, eso eres tú», hacia Baldoví, lo que, a su vez, ha derivado en que el diputado nacionalista Carlos Esteve se encarara con los representantes del PP y Vox. La tensión ha llegado a tal punto que la presidenta de las Cortes, Llanos Massó ha advertido que si el ambiente seguía así iba a suspender el Pleno.

En cierto modo, ese aviso ha servido para apaciguar la sesión en formas, aunque no en el fondo, ya que la exconsejera Isaura Navarro, de Compromís, ha vuelto a mentar el caso Oltra para echarle en cara a Bastidas y a la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, que también es diputada autonómica, el papel que tuvieron en dicho asunto. La réplica se la ha dado la vicepresidenta segunda y consejera de Igualdad, Servicios Sociales y Vivienda, Susana Camarero, que le ha recordado que la chica es la única víctima de aquellos hechos y que fueron los socialistas, con Ximo Puig a la cabeza, los que forzaron la dimisión de Oltra.

El Pleno ha continuado con las respectivas votaciones. En ellas, la mayoría absoluta de centro-derecha ha convalidado las tomas en consideración de todas las iniciativas legislativas pactadas e impulsadas por PP y Vox. La reacción de los partidos de izquierdas ha seguido la misma línea que han llevado durante la mañana: el PSPV-PSOE ha vuelto a enseñar las fotografías y los diputados de Compromís han golpeado sus escaños al grito de «vergüenza, vergüenza».