Los propalestinos acampados en una universidad de Castellón denuncian agresiones de la seguridad del centro
El Consejo Rector es una reunión privada, a la que los estudiantes no podían asistir y a la que decidieron entrar después de que el Rectorado haya obviado sus peticiones para dialogar y negociar sus demandas
La Assemblea d'Estudiants per Palestina de la Universidad Jaime I de Castellón han denunciado este lunes haber sufrido «golpes y empujones» por parte de la seguridad de la universidad al haber querido acceder de manera «no violenta» a la reunión del Consejo Rector, convocada a las 9:30 horas.
Los estudiantes, en un comunicado, han manifestado que han sufrido la «represión» del personal de seguridad en las puertas del Rectorado cuando pretendían «impedir» la celebración de esa reunión, que constituye el máximo órgano de decisión, en la sala de juntas. A través de sus redes sociales los propios alumnos han confirmado que todos se encuentran bien y no hay ningún herido.
Fuentes universitarias consultadas por Efe han señalado que el Consejo Rector es una reunión privada a la que no se puede asistir y por ello se ha indicado a los estudiantes que debían salir. Así, se les ha impedido acceder y la reunión ha comenzado finalmente con diez minutos de retraso.
Desde la asociación indican que los estudiantes han «bloqueado pacíficamente la entrada a la sala de reuniones después de que el Rectorado haya obviado sus peticiones para reunirse a negociar sus demandas».
Cuando se van a cumplir dos semanas de acampada y movilizaciones sociales «con el apoyo del profesorado, asociaciones y particulares», señalan los estudiantes, la organización pide «continuar con la negociación con el Rectorado».
La UJI, han indicado, «ha interrumpido el diálogo con el estudiantado organizado y no ha demostrado voluntad de reconocer explícitamente el genocidio como recomienda la relatora de la ONU».
Existe un contexto de «emergencia humanitaria diaria», han indicado, que «no parece suficiente para que la universidad pública de Castellón reconozca que se produce un genocidio» y, en esta línea, «que mantenga contratos con la banca armada», añade su comunicado, «reproduce el círculo de la violencia».
La asamblea de estudiantes insistirá en sus demandas e intensificará las acciones directas no violentas, como la de este lunes, porque «la negociación está incompleta y el silencio del Rectorado incomoda a la comunidad universitaria que sí que reconoce el genocidio».