Poblado de chabolas CastellónAyuntamiento de Castellón

Los vecinos de Castellón viven atemorizados por la okupación: «Nos insultan y nos amenazan continuamente»

La ciudad de la Plana sufre múltiples conflictos en diferentes zonas, donde esta problemática está aumentando e imposibilita la convivencia con los vecinos

La okupación es uno de los problemas que más preocupa a los vecinos de Castellón de la Plana, que este año están viviendo más casos que nunca en la ciudad. Desde una zona de chalets a principio de año, hasta el barrio universitario de la ciudad, pasando por incendios en 'poblados' de chabolas a las afueras. Estos son tan solo algunos de los casos que está sufriendo la capital de la Plana en tan solo la primera mitad de este 2024.

La zona del Raval Universitario de Castellón es una de las más conflictivas. Hace años que los vecinos denuncian altercados debido a grupo de okupas en unas viviendas sociales. Estas 'familias de okupas' controlan 14 de 60 viviendas del barrio y llevan años atemorizando a los vecinos.

La gota que ha colmado el vaso en la convivencia vecinal de la zona ha sido una brutal agresión por parte de unos okupas a una pareja de vecinos hace menos de un mes. Con bates de béisbol y patadas acabaron mandando a la mujer al hospital, tras dejarla inconsciente.

«Nos insultan y nos amenazan continuamente» y «tememos por nuestra vida», han asegurado algunos de los vecinos de la zona al periódico El Mundo. Los afectados han relatado que, además de romper los accesos al parking para meter coches que llevan abandonados años, también se encargan de romper la puerta del edificio para que cualquier persona de la calle pueda entrar.

La situación ha llegado a tal límite que algunos de los residentes del bloque han renunciado al alquiler social de los pisos que les habían asignado para irse de sus pisos porque tenían niños y temían que les pasara algo.

La Generalitat Valenciana ha tenido que intervenir debido a la gravedad de la situación. El director General de Vivienda y Suelo, Ernesto Fernández, se ha comprometido públicamente a que el bloque de vivienda pública, gestionado por la EVAH (Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo), tenga seguridad las 24 horas del día.

Además de la vigilancia, se instalarán puertas antivandálicas y cámaras de seguridad en el edificio. Unas medidas urgentes y necesarias para los vecinos, que en algunos momentos habían planteado denunciar a la EVAH por falta de gestión y soluciones con la okupación.

Hasta 56 incendios en nueve años

El caso del barrio universitario está también relacionado con otro de okupación de la ciudad. Y es que en la zona del PAI Mestrets se ha creado un asentamiento de chabolas que lleva en pie años y ha causado problemas a todos los vecinos de alrededor, provocando un total de 56 incendios en los últimos nueve años.

Tras el último incendio durante el mes de mayo, uno de los más graves hasta la fecha que obligó a desalojar a los chabolistas, la situación ha empeorado. Por una parte, algunos okupas de la zona han vuelto y ahora han construido infraviviendas de hormigón, desafiando así a las autoridades que querían desalojar y limpiar la zona.

Por otro lado, algunos de los chabolistas de la zona se han trasladado al Raval Universitario, donde ya hacía años que estaban las familias okupas, sumándose a ellos. Hay casos en los que incluso los propios okupas están alquilando las viviendas okupadas y llevándose así un beneficio económico.

La zona del PAU Lledó es también una de las afectadas en la ciudad, con diversos casos sonados desde el año pasado. Uno de los más sonados fue la okupación de un chalet con valor de más de medio millón de euros que estaba en venta, antes de las vacaciones de Semana Santa del pasado mes de abril.

Tras unos meses en los que el chalet se encontraba vacío, al ponerse el cartel de «en venta» una familia española con menores de edad se instaló y la Policía Local no pudo desalojarlos. La empresa a la que pertenece la vivienda tuvo que quitar el cartel y posponer la venta.

Aunque alrededor de esta zona de Castellón, donde abundan las urbanizaciones y los chalets, este no ha sido el único caso reportado. A principios de año los vecinos se manifestaron por la okupación en viviendas de todo el barrio y hubo una recogida de firmas, a la que se personó Antonio Ortolá, concejal de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento y portavoz de Vox para informar sobre las actuaciones en el PAU Lledó y hablar con los vecinos.

El doble de okupaciones en tres años

Y es que las cifras no mienten, además de la capital de la Plana, donde estos casos de okupación han crecido de forma alarmante en los últimos años, esta tendencia se esparce por toda la provincia de Castellón.

Desde la entrada en vigor del Decreto Ley del Gobierno que paraliza los desahucios en 2020, Castellón registra casi el doble de casos de okupaciones ilegales de viviendas. Desde 2015 a 2019, es decir, en los 5 años previos a la entrada en vigor de este Decreto, en la provincia hubo 380 okupaciones, según datos del Ministerio de Interior.

Sin embargo, estos mismos datos reflejan que desde 2020 hasta agosto de 2023, en tan solo tres años, hubieron 740 okupaciones. Son casi el doble de okupaciones, a falta de conocer el dato completo del año 2023 y de lo que llevamos de 2024.

En los municipios castellonenses ha habido otros casos de okupación sonados en los últimos meses como en Benicarló. Donde unos vecinos denuncian que viven con dos viviendas colindante okupadas, donde en los patios traseros se acumula basura y objetos, creando problemas de olores y plagas para los residentes afectados, «en un estado de ruina grave, con las vigas estructurales muy afectadas», según denuncian los afectados.

En la localidad de Moncófar, una propietaria de un duplex en la playa denuncia que una mujer de 75 años lleva 4 años okupando su vivienda. Ha asegurado, en declaraciones a Radio Castellón, que la okupación empezó en mayo de 2020, durante la Covid-19, cuando el Gobierno central aprobó el Decreto Ley para suspender los desahucios.