El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu
Los hoteleros valencianos denuncian un «trato humillante» del Gobierno central ante la gestión del Imserso
Hosbec lamenta que el Ejecutivo no quiera sentarse con la asociación para abordar la situación y sus miembros se ven abocados a «dejar de dar servicio para no bajar la calidad»
Los hoteleros de la Comunidad Valenciana han lanzado una severa advertencia al Gobierno central, amenazando con abandonar el programa de turismo social del Imserso si no se implementan cambios justos en las condiciones actuales. Toni Mayor, presidente de la Comisión del Imserso de la Asociación Empresarial Hotelera y Turística de la Comunidad Valenciana (Hosbec), ha expresado su frustración en una conversación con El Debate, poniendo de relieve la gravedad de la situación y las consecuencias de no abordar las demandas del sector.
Mayor destaca que los hoteleros han tenido que asumir las alzas en los costes de energía y alimentación sin que se refleje un incremento en las tarifas pagadas por los usuarios del Imserso. «Desde el sector hotelero hemos tenido que asumir la subida de precios de la energía, de alimentación... Y el Gobierno de España no sube nada el precio que pagan los usuarios por el servicio que damos, que llevan años congelados a pesar del aumento de precios de todo y que estamos sufriendo nosotros», afirma.
La reivindicación principal de los hoteleros es un «aumento justo en las tarifas», sugerido en un rango de ocho a diez euros por persona. «Pedimos a Servicios Sociales que suba algo los precios para dejar de estar dando un servicio a pérdidas. Para que la subida fuera justa, debería subir ocho o diez euros por persona, pero pedimos que negocien algo por parte del Ministerio de Turismo y de Servicios Sociales», explica Mayor. Este ajuste es esencial para que los establecimientos hoteleros dejen de operar con pérdidas y puedan mantener la calidad del servicio, la cual ha sido un factor clave en la alta satisfacción de los usuarios del Imserso.
«El Gobierno se carga el Imserso»
Asimismo, también señala que los hoteleros prefieren cerrar sus establecimientos antes que reducir la calidad del servicio. «Preferimos cerrar que bajar la calidad del servicio. Este es el único servicio que se ofrece a pérdidas y es por culpa del Gobierno, se están cargando el Imserso. Es un ninguneo por parte del Gobierno al sector del turismo», denuncia.
Un viaje del Imserso
La situación se agrava por la falta de comunicación y apoyo por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez con el sector. «Desde el Ministerio de Turismo y desde Servicios Sociales nos está dando un trato humillante. Ni siquiera nos reciben para explicarles nuestras demandas, les hemos pedido una reunión y no nos hacen caso», lamenta Mayor, quien también hace un llamamiento a otras administraciones como la Generalitat Valenciana y la Diputación de Alicante para que intervengan ante la inacción del Gobierno central. Hace dos años, las administraciones autonómica y provincial aportaron fondos que, aunque insuficientes, aliviaron temporalmente la crisis.
«Están dispuestos a pagar más»
El problema radica en que las tarifas pagadas por los usuarios no se han actualizado desde hace más de una década. Según explican desde Hosbec, los propios beneficiarios estarían dispuestos a pagar un incremento de hasta 20 euros por persona a la semana, pero los ministerios competentes se niegan a considerar esta opción. «Esta negativa está poniendo en riesgo la viabilidad del programa y la supervivencia de muchos establecimientos hoteleros que dependen de él», apunta Mayor.
La amenaza de los hoteleros de abandonar el Imserso refleja la desesperación del sector ante la falta de respuestas y soluciones por parte del Gobierno. La Comunidad Valenciana, un destino popular para el turismo nacional, podría ver una reducción significativa en la oferta de estos servicios si no se toman medidas urgentes. Los afectados claman por una revisión «justa» de las tarifas y una mayor sensibilidad hacia sus necesidades, apelando a la responsabilidad del Ejecutivo para garantizar la continuidad de un programa que beneficia tanto a los usuarios como al sector turístico.
Por su parte, el sector también mira hacia los gobiernos autonómico y provincial con la esperanza de que tomen la iniciativa ante la inacción del central y pongan «algún parche» a la situación teniendo en cuenta que esto también afectará a la economía y el empleo de la región.
