Termómetro que muestra las altas temperaturas de Valencia

Termómetro que muestra las altas temperaturas de ValenciaEuropa Press

Piscinas naturales: ¿Cómo combatir el calor de Valencia si no es en las playas?

Las cuatro piscinas naturales de la Comunidad Valenciana para refrescarse y hacer un plan distinto

El verano en la Comunidad Valenciana está marcado por las olas de calor y las altas temperaturas. En algunas localidades los termómetros han llegado a marcar los 40º. Como medida de combate hay quien opta por recorrer los 25 kilómetros de costa que tiene la ciudad levantina. Sin embargo, hay quienes no son fanáticos de la playa y buscan parajes perdidos por la naturaleza: las piscinas naturales.

La Comunidad Valenciana está repleta de ellas y se presentan como el plan perfecto para aquellos que buscan evadirse de los espacios concurridos y conectar, en muchas ocasiones, con la naturaleza. Parajes envueltos por montes verdes y agua refrescante, a la par que cristalina.

Los Charchos de Quesa (Quesa)

El Charco del Chorro de Corbera de los Charcos de Quesa

El Charco del Chorro de Corbera de los Charcos de QuesaAyuntamiento de Quesa

Los Charcos de Quesa los conforman cuatro piscinas naturales (Charco de la Horteta, Fuentes, Bañera y Charco del Chorro de Corbera) por las que recorre el cauce del río Grande. Con diferentes tamaños y profundidades, destaca la última poza por su gran cascada.

Un espacio natural situado a siete kilómetros del pueblo de Quesa. Llegar no tiene perdida, por las numerosas indicaciones que se ueden encontrar en el municipio y la ayuda del GPS.

Además de refrescarse en sus aguas, cuenta con una zona de pisnic donde ocmpletar una jornada de desconexión absoluta: mesas, zonas de sombra y aseos

Pozo Claro (Ontinyent)

Pozo Claro de Ontinyent

Pozo Claro de OntinyentAyuntamiento de Ontinyent

Pozo Claro se ubica en el municipio valenciano de Ontinyent. Este paraje natural por el que corre el agua del río Clariano cuenta con cinco piscinas naturales a su alrededor: Pozo de los Esclavos, Pozo Helado, Pozo de la Reja, Pozo Oscuro y Pozo de los Caballos.

A pesar de estar a tan solo 30 minutos del mar Mediterráneo, estas aguas destacan por ser muy refrescantes ya que están mucho más frías que el propio mar. Estas piscinas naturales ubicadas a dos kilómetros de Ontinyet, se llega por el camino del Llombo hasta el desvío de la Senda del Alba. Aunque también se puede llegar siguiendo las indicaciones del navegador GPS.

Eso sí, el sitio exige una reserva a través de la página web del lugar, para así evitar la masificación del entorno. Se puede acceder andando o en bicicleta. En caso de ir en coche, cuenta con un parking. Al acudir a Pozo Claro hay que tener en cuenta que de 1 al 30 de septiembre está prohibido hacer picnic, levar mesas, sillas, neveras o animales de compañía.

El Azud de Tuéjar (Tuéjar)

Piscina natural del Azud del Tuéjar

Piscina natural del Azud del TuéjarAyuntamiento de Tuéjar

El Azud de Tuéjar, como su propio nombre indica, es una piscina natural formada por el río Tuéjar que desemboca en el mar Mediterráneo. Este paraje cuenta con el Pozo de las Escaleras, una piscina natural de agua cristalina que mantiene una temperatura de 18º durante todo el año.

El sitio está totalmente acondicionado para los turistas ya que cuenta con merenderos y zonas de recreo, además de un parque infantil. Incluso junto a los aseos puedes encontrar un quiosco con servicio de helados.

Para acceder en coche se debe entrar por la rotonda de la CV-35 de la localidad para poder llegar al aparcamiento. El sitio está completamente señalizado y también se puede llegar siguiendo las indicaciones del navegador.

Al acudir a esta piscina natural se debe tener en cuenta que de jueves a domingos de los meses julio y agosto se cobra una tasa de cinco euros por vehículo hasta las cuatro de la tarde. Además, está prohibido el baño en estas aguas de animales domésticos.

El Gruñidor (Sot de Chera)

El Gruñidor en Sot de Chera

El Gruñidor en Sot de CheraAyuntamiento de Sot de Chera

El Gruñidor es la piscina natural ubicada en el municipio de Sot de Chera, el pueblo valenciano con a penas 300 habitantes. Este lago se ha formado por Sot, uno de los afluyentes del río Turia, que cuenta con más de 12 km de longitud, a través de los que va formando zonas ideales para el baño.

Para poder llegar al sitio simplemente hay que llegar al pueblo en el que se encuentra, Sot de Chera, allí está totalmente señalizado cómo acceder al aparcamiento del sitio. Hay que tener en cuenta que el aparcar tu vehículo cuesta cinco euros al día en sábados, domingos y festivos. Es obligatorio pagar ya que está prohibido aparcar fuera de la zona habilitada.

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