Momento del rescate de un ciclista encajado en la baca de una furgoneta

Momento del rescate de un ciclista encajado en la baca de una furgonetaConsorcio Provincial de Bomberos de Valencia

Sucesos

Detenido el conductor que arrolló a un ciclista en Valencia y circuló con él encajado en la baca un kilómetro

Al arrestado, de nacionalidad colombiana, podrían caerle hasta cuatro años de cárcel

La Guardia Civil ha detenido en la localidad valenciana de Alboraya al conductor de una furgoneta acusado de conducir sin tener el carnet, atropellar a un ciclista que quedó enganchado a la baca del vehículo y con el que recorrió así un kilómetro, y abandonar el lugar sin socorrerle, escondiéndose entre la maleza en un campo.

El suceso se produjo sobre las 10 de la mañana del martes en la CV-311 a la altura del Barranco de Carraixet, cuando una furgoneta atropelló a un ciclista y a consecuencia del impacto éste quedó enganchado en la baca del vehículo, a pesar de lo cual no se detuvo.

El conductor de la furgoneta circuló de esta forma un kilómetro aproximadamente hasta un campo anexo, donde finalmente se detuvo, según han informado este jueves fuentes de la Guardia Civil. En un primer momento trascendió que la distancia había sido de 300 metros, cuando en realidad había sido de más del triple.

Hasta el lugar se desplazaron dotaciones del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Valencia, Policía Local de Alboraya, Consorcio de Bomberos y servicios sanitarios, que desengancharon al ciclista y lo trasladaron al Hospital Clínico de Valencia en estado grave, sin que aparentemente su vida corra peligro.

El Equipo de Investigación de Siniestros del Subsector de Tráfico de Valencia abrió diligencias para esclarecer lo ocurrido y se ha detenido al conductor de la furgoneta, de 30 años de edad, nacionalidad colombiana y residencia en España.

Se le imputan dos delitos contra la seguridad vial, al haber abandonado el lugar del accidente y carecer de permiso de conducir, así como otro delito de lesiones por imprudencia.

Esos delitos pueden conllevar penas de prisión de hasta cuatro años y privación del derecho a conducir vehículos a motor por un máximo también de cuatro años, dependiendo de la evolución de las lesiones y las conclusiones de la investigación sobre la forma en que se produjo el siniestro vial, según la Guardia Civil.

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