El alcalde de Ibi, Sergio Carrasco, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

El alcalde de Ibi, Sergio Carrasco, junto al presidente del Gobierno, Pedro SánchezPSOE Ibi

Sánchez aprueba una planta solar en Ibi (Alicante) ninguneando al PSOE local y a los colectivos ecologistas

La modificación del proyecto no convence a vecinos ni al propio Gobierno municipal, que ha demostrado su falta de influencia con el Ejecutivo estatal, de su mismo color político

El Gobierno de España ha dado luz verde a la construcción de la megaplanta solar Kenerjona II en el municipio alicantino de Ibi, un proyecto promovido por la empresa Cobra Concesiones, a pesar de las protestas del Ayuntamiento, liderado por una coalición entre el PSOE y Som Ibi-Compromís. Este movimiento ha generado un conflicto en el seno del PSOE al manifestar su oposición al proyecto, alegando los potenciales impactos sobre el desarrollo industrial y el entorno natural de la localidad.

El nuevo diseño del proyecto, presentado por Cobra Concesiones, fue publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) el siete de agosto. La modificación principal consiste en limitar la instalación a suelo rústico, excluyendo el suelo industrial que previamente estaba contemplado, lo que buscaba aliviar las primeras críticas. Anteriormente, uno de los principales argumentos del Ayuntamiento para rechazar el proyecto era que afectaría al crecimiento industrial y social de Ibi, al ocupar un área industrial frente al polígono de Smurfit Kappa.

Las nuevas zonas afectadas por el proyecto incluyen Daroca, Reconco, Argamells y Safarich, cubriendo una superficie de 462.537 metros cuadrados con 72.352 módulos solares, mientras que la superficie total afectada por el vallado será de 711.474 metros cuadrados.

Impacto paisajístico y medioambiental

Desde Som Ibi han señalado que, aunque se haya reducido el impacto sobre el suelo industrial, persisten las preocupaciones sobre el paisaje y la biodiversidad. El grupo ha anunciado que está evaluando la posibilidad de presentar nuevas alegaciones y se sumará a las que presenten asociaciones y colectivos medioambientales, sociales y culturales. Entre estos colectivos destacan L'Ateneu Popular la Gavarnera, El Teix y Amics de les Muntanyes, que ya han manifestado su intención de presentar objeciones formales al proyecto antes del 18 de septiembre, fecha en que finaliza el plazo de presentación de alegaciones.

Estas agrupaciones locales defienden que la construcción de la planta generará un fuerte impacto visual en el entorno, además de riesgos para la biodiversidad. A ello se suma el hecho de que Cobra Concesiones ha presentado simultáneamente los proyectos de Kenerjona I en Castalla y la infraestructura de evacuación, que afectará el término municipal de Tibi. La extensión y conexión de estas instalaciones en distintos municipios ha generado un frente común entre las localidades afectadas.

Coordinación entre municipios

El pasado 3 de septiembre, se celebró una reunión entre las asociaciones de Ibi y la Plataforma Ciudadana de Tibi, junto con el grupo ecologista Natura i Gent de Castalla. El objetivo de este encuentro fue coordinar esfuerzos y recursos para enfrentar los proyectos de Kenerjona I y II, y aprovechar la experiencia de especialistas en diversas áreas. Además, los grupos locales han solicitado reuniones con los alcaldes de los municipios involucrados, expresando su preocupación por la falta de información y acciones por parte de los gobiernos municipales ante la nueva versión del proyecto.

En este caso, la aprobación del proyecto de Kenerjona II por parte del Gobierno de Pedro Sánchez podría poner de manifiesto la falta de liderazgo del alcalde socialista de Ibi, Sergio Carrasco, cuya capacidad de influencia ha sido insuficiente para frenar una iniciativa que cuenta con la oposición unánime de todos los partidos políticos locales, asociaciones ecologistas, vecinos y la propia Generalitat Valenciana. A pesar de los esfuerzos del Ayuntamiento por modificar el plan, el avance de la megaplanta solar pone de manifiesto la debilidad política del primer edil en este asunto y su incapacidad para alinearse con las demandas de sus propios socios de Gobierno y de los ibenses.

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