Así es la guirra, la única oveja autóctona valenciana que se encamina hacia la extinción
El Gobierno autonómico ha convocado la convocatoria para percibir las ayudas para el mantenimiento de un animal único cuya presencia en la región peligra
es la única oveja autóctona de la Comunidad Valenciana y su supervivencia corre peligro. La guirra, también conocida como roja levantina por el color de su piel y su localización, va menguando su población cada año y, si no se revierte la tendencia, su presencia en la región podría acabar siendo testimonial o incluso nula. No en vano está catalogada como «en peligro de extinción».
Según la Generalitat Valenciana, su población entre las tres provincias es superior a los 8.300 animales, si bien el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) rebaja la cifra hasta los 3.455 ejemplares (3.294 hembras y 161 machos), según el último censo, del 31 de diciembre de 2023. El primero, de 2009, cifraba la cabaña en 5.267 animales. En lo que coinciden ambas instituciones es en el número de ganaderías que se encargan de la cría de esta raza: un total de 21.
Su características son únicas, aunque cuenta con una 'prima' en el norte de África. De acuerdo con el MAPA, la guirra «está incluida en el Tronco Entrefino, y considerada independiente desde el punto de vista étnico, cuyo antecesor inmediato sería la raza ovina africana Bení Ahsen, de la Costa Atlántica de Marruecos, cuya llegada a España se vio favorecida por las buenas relaciones comerciales que han existido entre los dos puntos indicados: el Levante español y la citada zona africana».
La distribución geográfica de la roja levantina, sin embargo, hoy en día se ve reducida «salvo algunos rebaños en las zonas montañosas» a «la zona de la huerta de la Comunidad Valenciana», según el Departamento liderado por Luis Planas. Una situación que desde la Generalitat Valenciana se trata de revertir.
41.000 euros de ayudas
Así, la Consejería de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca ha convocado las ayudas para el fomento de esta oveja por un importe de 41.000 euros, según ha publicado en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana.
Las subvenciones incluyen los gastos de mantenimiento y conservación de la cabaña, la creación y mantenimiento de libros genealógicos, así como los del desarrollo del programa de mejora oficialmente reconocido para la raza, que incluyen las pruebas destinadas a determinar la calidad genética o el rendimiento del ganado, explica la Consejería encabezada por Miguel Barrachina.
Como ha anunciado el Ejecutivo autonómico en un comunicado, «esta vía de financiación está orientada a las organizaciones y asociaciones de ganaderos reconocidas por la Comunitat Valenciana que carezcan de ánimo de lucro y estén oficialmente reconocidas para la gestión del libro o libros genealógicos de la raza o razas en peligro de extinción».
Para el Ejecutivo liderado por el 'popular' Carlos Mazón, «este tipo de ganado en peligro de extinción representa un patrimonio de una riqueza singular, tanto desde el punto de vista económico y social, como medioambiental y de los recursos genéticos».
La raza es gestionada por la Asociación Nacional de Criadores de Raza Guirra, fundada en 1997 y con presencia principalmente en las comarcas de Valle de Albaida, Valle de Ayora, Campo de Turia y Canal de Navarrés, en Valencia, la Marina Alta, en Alicante, y la Plana de Castellón.