El PSPV desprecia a Valencia como sede de la Copa América mientras Morant se volcó con Barcelona
Para el evento en la ciudad condal no ha faltado apoyo económico ni institucional por parte del Ejecutivo central, pero ahora el PSOE valenciano rechaza que el evento se celebre en la capital del Turia
Que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y sus compañeros del Consejo de Ministros tienen una especial querencia por los asuntos relativos a Cataluña hace tiempo que dejó de ser una novedad. Por aritmética parlamentaria en el Congreso de los Diputados o por mera supervivencia política en el Palacio de la Moncloa, lo cierto y verdad es que todo aquello que concierne a las provincias de Tarragona, Barcelona, Gerona y Lérida le suponen al jefe del Ejecutivo y a sus asociados un esfuerzo extra respecto al que ofrece al resto de comunidades autónomas (exceptuando País Vasco y Navarra).
Como muestra de ello bien vale la celebración de la Copa América de Vela, que se ha celebrado en Barcelona y que tuvo lugar en Valencia dos ediciones consecutivas, en 2007 y 2010. Para el evento en la ciudad condal, que es uno de los mayores escaparates deportivos a nivel mundial, no ha faltado apoyo económico ni institucional por parte del Gobierno central.
Ahora bien, el panorama da un giro de 180 grados una vez la alcaldesa de la capital del Turia, la 'popular' María José Catalá, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, han hecho público que va la ciudad va a optar a volver a albergar la competición náutica. Este cambio de postura tiene especial relevancia si se atiende a las posturas mantenidas por la izquierda y, muy particularmente, por el PSOE, ya que Compromís y la Copa América siempre han sido enemigos íntimos.
Contradicciones de Morant
De este modo, el portavoz socialista en el Ayuntamiento levantino, Borja Sanjuán, considera que «no hay ninguna razón objetiva» para que el campeonato tenga lugar en aguas de Valencia porque persigue «objetivos particulares, personales y ganar mucho dinero». Eso sí, esa inflama propaganda contrasta con su nula aportación de pruebas, números ni nombres.
En su opinión, el mayor hito de vela del planeta traería a la capital autonómica una cantidad tal de turismo que, de nuevo con palabras y sin ningún dato avalado ni evaluable, la llevaría a «volver a ser estafada» por algo que «no genera un retorno positivo para la ciudad». Cabe subrayar que esas afirmaciones las dice obviando que la elección de Valencia como sede en 2007 supuso una reforma integral del Puerto y de su entorno, transformando para bien, por adición, a toda la capital.
Pero, a mayor abundamiento, esa negativa cerrada a la Copa América choca de plano con la posición mantenida por la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, que, a la par, es secretaria general del PSPV-PSOE por obra y gracia del propio Sánchez. Con su participación activa en el más que embutido Consejo de Ministros de cada martes, la exalcaldesa de Gandía votó a favor de otorgar nada más y nada menos que 20 millones de euros para que Barcelona celebrase la competición.
No queda ahí la cosa, ya que dio su aprobación para que de las arcas públicas salieran otros nueve millones de euros en dos partidas. Pero, por si no fuera suficiente, ha habido una fuerte e importante presencia institucional movida desde Moncloa dado que, otra vez gracias al voto de Morant, la Copa América se catalogó como un evento de «excepcional interés público».
Ese entusiasmo de la ministra a la hora de seguir a pies juntillas las directrices de su jefe de filas poco o nada tiene que ver con lo que sus compañeros en el Ayuntamiento de Valencia piensan sobre la competición. Más allá de una eventual y quizás fantasiosa masificación turística, Sanjuán propone que lo que vaya a invertir en traer el campeonato al puerto levantino se debería destinar, siguiendo el argumentario de esta semana, a «vivienda».
Ante esta aseveración, fuentes de la Generalitat Valenciana consultadas por El Debate son contundentes: «Entonces, ¿por qué el Gobierno de España, que ha pagado 20 millones, no ha destinado esa cantidad a vivienda pública? Un poco de coherencia», zanjan.