DANA-Paiporta
Paiporta arrasada una semana después de la tragedia
El Debate se adentra en la zona 0 para mostrar la realidad de la vida tras la DANA
Paiporta, la zona 0 de la DANA, está arrasada. Basuras sin recoger desde hace una semana apiladas en montañas en la calle, cientos de personas haciendo cola para conseguir algo de comida caliente; puestos de avituallamiento con agua, café, ropa y productos de limpieza y desinfección; agua estancada, centímetros de lodo y un ambiente cargado que dificulta la respiración.
Uno de los problemas que se enfrentan los vecinos es a la acumulación de basura. Después de una semana sin pasar los servicios de recogida, las bolsas y los alimentos podridos se acumulan en las calles.
Los garajes subterráneos continúan inundados, mientras que los que están a la altura de la calle no están inundados, pero sí devastados. El lodo se ha apoderado de ellos y las humedades.
Grupos de jóvenes acuden cada día en transporte público que ha puesto la Generalidad de Valencia para ayudar a limpiar.
La ayuda no para en todo el día. Muchas personas empiezan a ponerse EPI para protegerse de las enfermedades e infecciones que pueda haber por el agua estancada durante casi una semana entera.
Los restos inmuebles -coches, muebles, electrodomésticos, puertas, motos- continúan colapsando Paiporta.
La gente ha sacado todo lo que tenía destruido por la DANA a las calles. En algunos puntos de Paiporta el montón es de tal magnitud que ocupa toda la calle y mide alrededor de dos metros.
A la hora de la comida cientos de personas hacen cola en diferentes puntos de entrega de alimentos para poder llevarse a casa un plato caliente para comer en el día. Unas filas que impactan.
La ayuda comienza a llegar, aunque todavía se necesitan muchos más recursos, más militares y miembros de la UME. En definitiva, más manos debido a la magnitud de la catástrofe.