El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, en una imagen de archivo
Mazón, «consternado» por la muerte del operario en Masanasa: «Estaba ayudando en labores muy importantes»
Ha avanzado el declaraciones a la televisión autonómica valenciana que el trabajador que resultó herido ya ha sido dado de alta
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, se ha mostrado «consternado» por la muerte de un operario de Tragsa en el colegio Lluís Vives de Masanasa (Valencia) tras un derrumbe y ha transmitido el pésame del Gobierno valenciano a la familia del fallecido. «Todas las condolencias para un grandísimo trabajador que estaba ayudando en labores muy importantes para nosotros», ha apostillado.
De esta manera lo ha manifestado el jefe del Consell, a primera hora de este lunes a las puertas del Palacio de la Generalitat, en unas declaraciones realizadas a la televisión autonómica valenciana, À Punt, recogidas por Europa Press.
Así lo ha manifestado después del accidente en el que ha fallecido un trabajador de 51 años y otro de 35 ha resultado herido tras la caída de un porchado del citado centro educativo. «Estamos muy consternados», ha reconocido Mazón, al tiempo que ha transmitido «todas las condolencias para un grandísimo trabajador que estaba ayudando en labores muy importantes para nosotros». «Se lo hemos trasladado a toda su familia», ha añadido.
Por otro lado, ha manifestado que si esta situación «tiene alguna parte buena» es que el otro trabajador que resultó herido ya ha recibido el alta hospitalaria, según ha avanzado. Los hechos ocurrieron este domingo poco antes de las 12.00 horas. Tras conocerse el suceso, el dirigente 'popular', que en un primer momento iba a acudir al lugar del suceso, según fuentes de la Generalitat, finalmente convocó una «reunión de urgencia» en el Palacio de la Generalitat con representantes de Tragsa y la Consejería de Educación para analizar «todas las actuaciones».
Al terminar el encuentro, el consejero de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, aseguró que el derrumbe había sido «imprevisible» y que sucedió cuando los empleados estaban actuando en un porche en el exterior del edificio. En este sentido, puntualizó que «en ningún momento había un informe que dijera que el edificio corría riesgo de colapsar».