
Fachada de la Audiencia Provincial de Alicante
Condenan a un conductor drogado a tres años de cárcel por provocar la muerte de dos octogenarios en Alicante
El enjuiciado circulaba a más de 90 kilómetros por hora a pesar de que la velocidad en ese punto estaba limitada a 30, y colisionó lateralmente con el vehículo en el que viajaban las víctimas
Un conductor ha sido condenado a tres años de cárcel por triplicar la velocidad permitida en estado ebrio y positivo en drogas y provocar la muerte de un matrimonio octogenario, él de 83 años y ella de 78, y heridas a la nieta de ambos, de 11, que viajaban en otro coche en el casco urbano de Pinoso (Alicante), en julio de 2020.
Este individuo ha alcanzado un acuerdo de conformidad este jueves en la Audiencia de Alicante y ha sido condenado in voce por los delitos contra la seguridad vial, homicidio por imprudencia y lesiones.
El choque mortal tuvo lugar el 19 de julio de 2020 en un cruce a la altura del Badén de Rico Lucas, en el centro de Pinoso, donde el enjuiciado circulaba a más de 90 kilómetros por hora a pesar de que la velocidad en ese punto estaba limitada a 30, y colisionó lateralmente con el vehículo en el que viajaban las víctimas.
Además del fallecimiento del matrimonio, la nieta sufrió lesiones de las que tardó 89 días en curar, según la Fiscalía, que ha señalado que el conductor dio positivo en consumo de alcohol, cocaína y benzodiazepinas.La acusación pública solicitaba inicialmente una pena de seis años de prisión, que han quedado reducidos a la mitad a partir del reconocimiento de la autoría del delito y del acuerdo alcanzado con la familia de los fallecidos por el pago de la compensación económica como mecanismo de reparación del daño ocasionado, en concepto de responsabilidad civil.
El tribunal de la Sección Tercera ha dictado sentencia condenatoria de viva voz en la que, además de la pena de privación de libertad, se incluye la pérdida de vigencia del permiso de circulación y, adicionalmente, la prohibición de conducir por un tiempo de seis años.
De igual modo, la pena incluye el decomiso del vehículo del procesado en un fallo firme, toda vez que tanto las acusaciones como la defensa han confirmado su intención de no recurrir.