Armada / S-80 El lento renacer de los submarinos españoles
El Galerna S-71 termina una gran carena de 5 años y el Tramontana S-74 termina otra revisión. El nuevo S-81 está ya en su fase final de construcción
Sistemas inteligentes de seguridad, potentes armamento, con capacidad para misiles Tomahawk y Sub-Harpoon o torpedos DM2 y A4, sensores, comunicación vía satélite, un revolucionario sistema de propulsión independiente de la atmósfera (AIP)... Son algunas características de los nuevos submarinos de la clase 80, llamados a dar un importante salto cualitativo en el Arma submarina de la Armada. Ad Utrunque Paratus (Preparados para todo). Es el lema de la Flotilla de Submarinos española, un lema que da fe del espíritu de sus miembros. Y también de lo necesario de los nuevos submarinos. Quizás no sean colosos nucleares como los de la clase Ohio de Estados Unidos. Pero España está bien necesitada de un recambio ante los veteranos S-71 Galerna y S-74 Tramontana, los dos ahora mismo en activo.
En activo, pero en el «taller». El submarino Galerna S-71 ha finalizado oficialmente la gran carena (revisión) que venía realizándose desde hace cinco años con el fin de prolongar su vida útil. Dicha gran carena se da por terminada tras realizar las pruebas de sistemas. Para estas pruebas se contó con el apoyo de otros buques de la Armada como la fragata Canarias y el buque de salvamento marítimo Neptuno.
El S-71 Galerna comenzó a principios de 2018 su complejo proceso de revisión, gracias al cual está previsto que pueda seguir funcionando durante otros cinco años. Se trata de uno de los dos veteranos submarinos que mantiene activos la Armada –el otro es el 'Tramontana' (S-74), en la actualidad en una revisión rutinaria– a la espera de los futuros y modernos buques de la clase S-80. El primero, el S-81 Isaac Peral, tiene previsto entregarse a la Armada en abril de 2023.
El submarino S-80 representa el futuro en la Armada tiene una partida presupuestaria para 2023 de 200 millones de euros. La entrega a la Armada está prevista para el próximo mes de abri. De la serie S-80 también forman parte el S-82 Narciso Monturiol (cuya entrega se prevé en diciembre de 2024), el S-83 Cosme García (octubre de 2026) y el S-84 Mateo García de los Reyes (febrero de 2028), que se encuentran aún en diferentes fases de desarrollo.
Las misiones que tendrán que afrontar los S-80 están marcadas por la Revisión Estratégica de Defensa, publicado en febrero de 2003. Este documento considera al Programa de Submarinos Clase S-80 como un Nuevo Programa Principal de Armamento con carácter prioritario. Según establece, sus misiones principales son:
Misiones futuras
- Proyección del Poder Naval sobre tierra.
- Guerra Naval Especial.
- Protección de una Fuerza desembarcada.
- Vigilancia.
- Protección de una Fuerza Naval.
- Disuasión.
Además, según el mismo documento, los submarinos S-80 deberán hacer frente, tanto en el Océano Atlántico como en el Mar Mediterráneo, a las amenazas de:
Amenazas
- Campos minados.
- Buques de superficie, con sonares activos y pasivos.
- Aeronaves antisubmarinas, con radar, sonoboyas activas y pasivas y sonar calable.
- Submarinos nucleares y convencionales de diseño avanzado.
Fuente (Armada)
Todo ello convierte al S-80 en un elemento imprescindible para la Armada, sobre todo en el contexto que vivimos por la invasión de Rusia a Ucrania, con la OTAN activando a sus aliados por tierra, mar y aire en todo tipo de maniobras y ejercicios militares.
Sistema de combate del S-80
- Capacidad de lanzamiento de misiles de intervención en tierra a larga distancia.
- Sistemas de comunicaciones por satélite y enlace de datos Link, para integración en la Fuerza.
- Sensores acústicos de corto, medio y largo alcance que permitan la detección, clasificación, aproximación y ataque a unidades de superficie, submarinos y tráfico mercante, detección de minas y otros obstáculos.
- Medios de detección visuales, optrónicos (todo tiempo) y electromagnéticos que le permitan llevar a cabo, de forma discreta, la aproximación, el ataque, la evasión y las operaciones de obtención de inteligencia.
- Medios de ayuda a la navegación que permitan operar con la precisión que exigen determinados cometidos.
- Torpedos pesados de doble propósito y largo alcance, misiles antibuque y minas.
La Armada se ha planteado en varias ocasiones una posible ampliación de la serie S-80 para aumentar sus capacidades, especialmente en escenarios internacionales. Dadas las circunstancias actuales y el aumento presupuestario en Defensa, quizás haya llegado el momento de dar un nuevo impulso al lento renacer de los submarinos españoles.