Los propios soldados de El Bruch evitaron que se sortearan los servicios de una prostituta
La rápida reacción de Defensa trató de evitar que los movimientos de izquierdas utilizaran la noticia para desprestigiar al Ejército
Hay pocas dudas de que el sorteo de los servicios de una prostituta llegó a plantearse. Pero también existe la misma convicción de que la idea, denigrante y de muy mal gusto, no fue más allá de una malísima propuesta de dos soldados que no fue más allá. Ya que fueron los mismos compañeros de los proponentes quienes consideraron que la iniciativa no tenía ninguna gracia.
Fuentes jurídicas consultadas consideran que la denuncia no tiene demasiada trayectoria judicial ya que no pasó de ser unos comentarios en una instancia privada, igual que la aparición de un cartel en la cantina del acuartelamiento de El Bruch, que, además de tratarse de un ámbito privado según sentencia del Tribunal Supremo, la escasa elaboración del anuncio, un papel con tres fotos en blanco y negro con el título de «Dama de Compañía» sin otro mensaje ni condicionantes, demuestra una gran torpeza por parte de los proponentes y ninguna oficialidad.
Todo hace indicar que el sorteo no llegó a celebrarse, tal y como afirmó este jueves Europa Press. No hay constancia de papeletas y fueron los propios integrantes del chat en el que se propuso la idea quienes acudieron al periódico Ara para dar a conocer la iniciativa y que se cortara cuanto antes. El hecho de que no acudieran a la Justicia, ni militar ni ordinaria, denota que ni la iniciativa tiene carácter delictivo ni los soldados querían dar los nombres que les pedirían en instancias militares o judiciales.
No se realizó el sorteo
Fuentes militares recordaron a Europa Press que el caso se está investigando, por lo que no pueden confirmar nada definitivamente, pero que todo apunta a que «el asunto se cortó inmediatamente por parte de los propios compañeros» y, por tanto, no se realizó el sorteo ni se contrataron los servicios de la trabajadora sexual.
Pero la rápida reacción del Ejército llevando una denuncia ante la Fiscalía demuestra el importante daño que iniciativas como ésta, por muy particulares que sean, pueden hacer al estamento militar.
De hecho, poco tardaron los movimientos de izquierdas en lanzar sus proclamas contra el Ejército. Al frente, como suele ser habitual, sin comprobar veracidad alguna pero con su discurso resultón y populista, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián: «La manada lleva uniforme», aseguró en Twitter.
Robles pide la expulsión
Por su parte, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha considerado este viernes que los autores de la propuesta deberían ser expulsados del Ejército. «Que haya quienes, no sé cómo calificarlos, realizan esas manifestaciones son un descrédito para las Fuerzas Armadas y no merecen estar en ellas», ha asegurado la ministra en una visita al Parque y Centro de Mantenimiento de Sistemas Acorazados en el distrito madrileño de Villaverde.
Preguntada sobre si la investigación interna puede acabar en expulsiones ha indicado que hay que ver las conclusiones pero ha mantenido que «si efectivamente se ve que hay personas que han aprovechado instalaciones militares evidente que se abrirá el correspondiente expediente y tienen que estar fuera de las Fuerzas Armadas».
«Podemos sentirnos absolutamente orgullosos de los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas españolas, que trabajan, son responsables y son un ejemplo en Europa y en el mundo», ha asegurado Margarita Robles