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Esta es la comunidad autónoma donde tienes más posibilidades de que te caiga un rayo

El año pasado la Comunidad gallega un 66 % más de descargas eléctricas que el anterior

En Galicia, la lluvia es una compañera habitual, pero las tormentas eléctricas son un fenómeno menos común. Sin embargo, el año pasado trajo consigo un cambio notable en este patrón meteorológico. Con un aumento del 66 % en la actividad de rayos en 2023, la región se vio sacudida por una serie de tormentas eléctricas que desafiaron las expectativas, al convertirse en el segundo año con más descargas eléctricas de la serie al estar solo por detrás de los 47.937 detectados en 2017.

Según datos proporcionados por la Xunta de Galicia, el año esta región experimentó un total de 77 días con tormentas eléctricas, revelando una actividad atmosférica excepcionalmente alta. Entre los meses más destacados se encuentra junio, con un total de 15 días de tormenta, seguido de cerca por mayo, con 13 días, y septiembre, con 12 días con este fenómeno meteorológico.

El mes de junio registró un total impresionante de 16,640 rayos, representando el 35 % del total del año. Le siguieron de cerca septiembre y mayo, con 13.675 y 13.583 rayos respectivamente, contribuyendo significativamente a la cifra anual.

Sin embargo, fue el 9 de septiembre el día que se destacó por encima de todos los demás, con un registro de 10.204 descargas en una jornada en las que Galicia estaba bajo la influencia de una extensa zona de bajas presiones relativas en superficies acompañada por una depresión en altura al noroeste de la Península. Por ello, la situación derivó en un elevada inestabilidad atmosférica, al producirse en una época del año en la que en superficie las masas de aire todavía son muy cálidas.

Datos por provincias

El análisis por provincias revela que Lugo encabezó el registro de rayos en Galicia en 2023, con un 34 % del total, seguida por Orense con un 28 %, Pontevedra con un 20%, y La Coruña con un 18 %.

Por otro lado, los radiosondajes que es un método de exploración de la atmósfera que permite conocer la estructura vertical desde el suelo hasta una altura de 25 kilómetros por medio de la medida de las principales variables termodinámicas revelaron datos de interés. Datos que evidenciaron que la altitud de la tropopausa, zona de transición entre la troposfera y la estratosfera, varió entre los 10 kilómetros en el mes de febrero y los 14 en agosto. Entretanto la del cero térmico osciló entre 2 kilómetros en enero y 5 kilómetros en agosto. Al respecto, y a nivel anual, la altura media de la tropopausa se encontró en 12,1 kilómetros y la del cero térmico a 3,2 kilómetros.

La Xunta ha indicado que, considerando la evolución de estas variables, no se aprecian tendencias desde el inicio de los lanzamientos en el año 2011.

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