El BNG intenta boicotear en Europa el impulso de Rueda a la eólica
Mientras el Gobierno gallego busca llegar a un punto medio entre la expansión de los parques y las peticiones medioambientales, el BNG acude a la Comisión Europea para denunciar a la eólica
el freno judicial a la eólica en Galicia ha supuesto la paralización de casi 60 parques. Mientras, el Gobierno gallego intentar sortear los retos a los que esta energía se enfrenta, entre las críticas de la oposición y de ciertos colectivos que están en contra de la expansión de la misma.
Esta semana, el BNG ha utilizado su presencia en el Parlamento Europeo para presentar una pregunta ante la Comisión Europea sobre los proyectos eólicos en la región. La eurodiputada nacionalista Ana Miranda ha informado al órgano europeo de la paralización de los parques para extender la problemática fuera de nuestras fronteras.
«Uno de los argumentos más empleados para acordar esta paralización es que la ejecución de estos proyectos podría provocar daños irreversibles a valores ambientales sensibles y una grave afectación a la Red Natura», ha explicado Ana Miranda, quien también ha apuntado que en sus resoluciones el alto tribunal gallego señala que «está acreditado que las instalaciones podrían afectar a especies vulnerables o en peligro de extinción».
Miranda ha preguntado a la Comisión si es consciente de la incompatibilidad «entre el Pacto Verde y la ejecución en Galicia» de estos proyectos. «Le preguntamos a la Comisión Europea si estos proyectos son receptores de fondos europeos, porque no vamos a permitir desde el BNG que se usen los fondos europeos para expoliar nuestro territorio», subrayó la eurodiputada del BNG.
Por su parte, desde la Xunta se han planteado varios cambios con la intención de equilibrar la eólica con las peticiones de la oposición y los colectivos en contra. A través de la ley de acompañamiento de los presupuestos, se ha establecido, por ejemplo, que los parques eólicos «no podrán implantarse fuera de las áreas incluidas en el plan sectorial eólico de Galicia, a excepción de las modificaciones sustanciales de los parques en funcionamiento en los términos que se desarrollen reglamentariamente, así como aquellos proyectos que tengan una clara incidencia territorial por su entidad económica y social».
Por otro lado, se ha reactivado la tramitación de la ley de promoción de beneficios sociales u económicos de los proyectos que se nutren de recursos naturales de Galicia. Además, esta misma semana Rueda defendió la modificación del canon eólico. «Si ahora se está concentrando (las empresas eólicas), y parece lógico, en las repotenciaciones. Es decir, menos molinos pero más potentes y, por lo tanto, menos impacto visual, pues queremos que eso no repercuta en una menor recaudación en el canon eólico», subrayó descartando la bajada de ingresos en este sentido. De esta manera, el canon se establecerá según la potencia y no el número de molinos colocados para adecuarse a los cambios que se están llevando a cabo en los parques.