Pan Gallego con Indicación Geográfica ProtegidaXunta

Nueve panaderías de Galicia se cuelan entre las 50 mejores de España

Este certamen reconoce el esfuerzo y el talento de los mejores artesanos del pan

El pan en Galicia es más que un alimento, es una tradición de transmisión generacional. Con su característico sabor a cereal, miga esponjosa y corteza crujiente, el pan gallego es apreciado en toda España por su calidad y autenticidad.

Su elaboración sigue métodos tradicionales, utilizando harinas locales y técnicas artesanas que han convertido al pan gallego en una de las exquisiteces gastronómicas de la región avalado, incluso, por la Denominación de Origen Protegida (DOP).

Por ello, no es sorpresa que, este año, nueve panaderías gallegas se hayan posicionado entre las 50 mejores de España, destacando en un concurso que celebra la excelencia en la panadería artesanal.

Panaderías gallegas en el top español

El concurso 'L@s 50 panader@s top de España', un evento que reconoce el esfuerzo y el talento de los mejores artesanos del pan, ha reunido a participantes de todo el país en una serie de eliminatorias que culminaron en una gala en Madrid el pasado 29 de octubre.

En cada región, los panaderos presentaron lo mejor de sus productos, y el jurado evaluó aspectos esenciales como el aroma, el crujido, el sabor y la textura de los panes.

Además, el proceso incluyó una inspección anónima en cada establecimiento para verificar la presentación del producto y la atención al cliente, asegurando que estos establecimientos fueran realmente de los mejores del país.

Galicia fue una de las grandes protagonistas del certamen. Un total de nueve panaderías gallegas obtuvieron su lugar en el prestigioso listado.

Estas son las panaderías gallegas

La Amaquía Panadería fue uno de los obradores premiados en este prestigioso certamen. Situada en Porriño y Mos, provincia de Pontevedra, está dirigida por Luis Miguel Iglesias Lago. Es conocida por sus panes artesanos que son un referente en la zona.

Sin salir de esta localidad pontevedresa, destaca la Panadería Argibay que también obtuvo este reconocimiento. Liderada por Claudio Rodríguez Rodríguez, representa la cuarta generación de panaderos dedicados al oficio desde 1882, con productos ecológicos que resaltan el respeto por el medioambiente y la calidad en cada pieza. Estos dos reconocimientos dejan patente el buen pan que hacen en Porriño.

Continuamos en la provincia de Pontevedra, pero en esta ocasión nos situamos en Nigrán y Bayona en donde se localiza la panadería La Pintora de Adolfo Carballo. Un obrador que destaca porque sus panes son horneados con recetas tradicionales. Y PanDemonium en Vigo, dirigida por Diego Marín de la Rosa, que fue premiado por su propuesta la cual que fusiona sabores gallegos y técnicas francesas. PanDemonium es una panadería con numerosos reconocimientos por su saber hacer.

Ya en la provincia de La Coruña, fue reconocida la panadería Pan Ignacio, bajo la dirección de Fernando Espasandín Pérez. Se trata de un obrador en el cada pieza de pan combina tradición y sabor. Panadería Lorbé regentada por Axel Pérez Pérez, es una empresa familiar comprometida con el uso de ingredientes frescos y de proximidad, que busca mantener siempre la más alta calidad en sus productos.

La Panadería Luna y Panadería Mercedes, ambas también en La Coruña. Luna está dirigida por Andrés Romero Vázquez, valorada por su dedicación en la elaboración artesanal de panes. Mientras que Pnaadería Mercedes, de Miguel Ángel Beade, con una gran y reconocida trayectoria, destaca por su apuesta por el pan tradicional.

Por último, situada en Finisterre, la Panadería Germán entra en la lista de las mejores de España con más de 130 años de historia. Esta panadería, gestionada actualmente por Juan Luis Estévez Domínguez, destaca por su #MétodoFisterra, que le ha otorgado varios reconocimientos a nivel nacional.

Este listado de las 50 mejores panaderías de España no solo confirma la calidad del pan gallego, sino que también impulsa a Galicia como una de las cunas de la panadería artesana en el país, donde el buen pan es, indudablemente, un orgullo regional.