Estadio de Riazor, en La Coruña

Fin al conflicto entre Deportivo y Ayuntamiento de La Coruña: acuerdan prorrogar el acuerdo actual para Riazor

La alcaldesa celebra «el cambio de parecer del accionista mayoritario» del club, que propuso renovar el convenio vigente hasta 2025 por otros 25 años

Ni 48 horas ha durado el conflicto entre el Deportivo y el Ayuntamiento de La Coruña por el uso del estadio municipal de Riazor. El Gobierno municipal hizo público un comunicado en la mañana de este miércoles en el que anuncia que la alcaldesa, Inés Rey (PSOE), acepta la «rectificación» que la entidad blanquiazul realizó en la noche del martes, en la que informó que estaría dispuesta a «prorrogar el actual convenio por un periodo de 25 años» y renunciaba «a los 40» solicitados inicialmente.

La regidora valora la «disposición» del club «a firmar el convenio para el uso gratuito de Riazor» durante el próximo cuarto de siglo «en los términos propuestos» desde María Pita, «muy semejantes a los ahora vigentes y que evitan cualquier tipo de especulación con el patrimonio municipal».

Rey mantuvo una conversación con el presidente del Dépor, Álvaro García, para retomar la relación entre ambas instituciones. Además, lamenta que «se haya privado» a la afición de la celebración tradicional en el Ayuntamiento tras lograr el equipo el ascenso a Segunda División.

«La alcaldesa celebra, en todo caso, el cambio de parecer del accionista mayoritario del Dépor y que acepte finalmente las condiciones que han regido la cesión del estadio municipal durante los últimos 25 años», asegura el comunicado hecho público por el Ejecutivo local esta mañana.

El Consistorio coruñés también informa que «de modo inmediato iniciará los trámites para renovar el convenio de cesión en los términos del actual acuerdo, firmado en el año 2000 y con vencimiento en el 2025».

Cambio de postura

Pocos minutos después de las 22:00 horas del martes, el conjunto coruñés publicó un mensaje grabado en vídeo del presidente de la entidad, Álvaro García, y un comunicado en el que se anunciaba que el club daba marcha atrás y estaría dispuesto a «prorrogar el actual convenio por un periodo de 25 años y renuncia a los 40 años incluidos en su propuesta».

«La prórroga incorpora la cláusula de renegociación en caso de cambio de titularidad. En este sentido, la propiedad ha garantizado al club que el Dépor no está en venta y que el compromiso es a largo plazo», indicó. También recalcó que el Deportivo quiere «un estadio exclusivamente para uso deportivo, sin otro uso que la celebración de partidos de fútbol, de los primeros equipos o de cualquiera de sus filiales».

Origen de la disputa

El conflicto se inició el pasado lunes, cuando estaba previsto que la entidad blanquiazul acudiese a la tradicional recepción en el Ayuntamiento coruñés tras lograr el ascenso a Segunda División. Una horas antes el club hizo público un comunicado en el que indicaba que «en estos momentos queda suspendida cualquier visita institucional a la espera de la solución de todas las solicitudes realizadas en los últimos tres años» y en el que alertaba que considera que la relación actual entre el RC Deportivo y el Ayuntamiento no es la idónea para celebrar una visita de estas características”.

El motivo que adujo fue que «desde hace más de tres años el Real Club Deportivo está solicitando al Ayuntamiento de La Coruña la ampliación del convenio sobre el uso del estadio Abanca-Riazor» y «este acuerdo es imprescindible para garantizar el futuro del club en la categoría de plata del fútbol español».

La alcaldesa de La Coruña, por su parte, acusó a Abanca, propietaria de la entidad blanquiazul de utilizar al Real Club Deportivo, como propietario del club, «con el único ánimo de chantajear y sacar rédito particular» tras la decisión de no acudir este pasado lunes a la tradicional recepción institucional en la plaza de María Pita.

Finalmente, el Dépor propuso renovar el convenio vigente por el uso del estadio en los términos actuales, a lo que ha accedido el Ayuntamiento.