Rotonda sobre rotonda: la solución para aliviar el tráfico que llegó a Galicia hace 10 años

La gestión de la movilidad es uno de los mayores retos de las ciudades modernas y de las grandes áreas de población. En Galicia, la dependencia del automóvil es muy elevada debido a que los servicios ferroviarios, más allá del Eje Atlántico y del corredor a Madrid, son muy deficientes y el sistema de autobuses interurbanos muchas veces no satisfacen las necesidades de sus usuarios. En algunos casos, las infraestructuras viarias no están preparadas para albergar una ingente cantidad de vehículos. Fue el caso del polígono de Sabón (Arteixo), que acoge la sede central de Inditex, y que desde hace 10 años se puso en marcha una llamativa solución.

Una rotonda elevada situada justo encima de otra ya existente. Este fue el planteamiento que ideó la Xunta de Galicia, titular de la carretera, para acabar con los atascos que se generaban en las horas punta, momento en que miles de trabajadores entran y salen de sus puestos de trabajo al mismo tiempo, como es el caso de Sabón, una de las áreas empresariales más importantes de Galicia.

La obra se realizó en la AC-552, el vial que enlaza Arteixo y La Coruña, justo en el desvío hacia el acceso principal al polígono, en el año 2014. Su coste rondó los 11 millones de euros, los trabajos duraron cerca de 18 meses y consiguió reducir los habituales atascos que se formaban en la zona.

Esta actuación sirvió para crear una infraestructura que convirtió una simple rotonda en un cruce con dos niveles de altura, de tal modo que se instaló una glorieta nueva sobre la antigua. El objetivo era el de separar el tráfico que va al polígono y el que utiliza la carretera que une La Coruña con Arteixo. La obra la asumió la Consellería de Infraestructuras de la Xunta, que destacó, en su momento, que se trataba de un proyecto «clave para aliviar el principal acceso al polígono de Sabón».

En la inauguración de la obra, realizada a finales de 2014, el entonces presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, admitió que la nueva rotonda «probablemente debimos haberla hecho desde hace mucho tiempo, sobre todo en una época de bonanza económica». También señaló que ha sido una infraestructura que «valió la pena» realizar pese a las «molestias». También aseguró que con esta actuación se dio un impulso económico y de mejora de la conectividad y competitivad de uno de los pulmones empresariales de Galicia.