Esta es la única ermita románica en mármol de EspañaTurismo de Galicia

Así es la única iglesia románica de mármol de España y está en Galicia

Su visita es recomendada por la prestigiosa revista National Geographic

Galicia es una región rica en historia y tradiciones y cada uno de sus rincones cuentan una historia sobre su patrimonio cultural que alberga algunos monumentos únicos que destacan no solo por su belleza, sino también por su singularidad que las hacen únicos.

Este es el caso de la iglesia de San Pedro Fiz de Hospital , la única iglesia románica de mármol de España. Esta edificación ha sido recomendada por la prestigiosa revista National Geographic.

Escondida en el bosque

La Iglesia de San Pedro Fiz de Hospital se alza en las montañas lucenses de O Incio, rodeada de bosques autóctonos.

Es un templo románico de finales del siglo XII que fue mandado construir por la Orden Militar de San Juan de Jerusalén o de Malta, con la idea de servir de centro de atención a las personas necesitadas y a los peregrinos. La edificación formaba parte de un conjunto amurallado formado por una fortaleza, hospedería y hospital.

El conjunto fue adquirido en el siglo XVI por lo señores de Quiroga para ser usado como panteón. En su interior aún se guarda la tumba de uno de sus miembros: El comendador fray Álvaro de Quiroga. La Orden de los Caballeros de Malta dejaron su huella en otros monumentos de esta zona de Lugo, como son la iglesia de San Juan, al norte de San Pedro Fiz, o el castillo de la encomienda en Quiroga, al sur.

Una construcción única

La Iglesia de San Pedro Fiz es una construcción única debido al material empleado para su construcción: Piedra caliza y, fundamentalmente, mármol extraído de las canteras locales.

Es la única iglesia románica construida en mármol en España y de las pocas en todo el sur de Europa. Este aspecto dio lugar a un dicho popular que reza: «Desde O Incio hasta Roma, otra iglesia de mármol no se encontrará».

Contaba con dos torres defensivas románicas que tenía función defensiva para los Caballeros de la Orden de Malta. Una de ellas, fue reconvertida en torre de campanario, mientras que en la otra se hizo un panteón para los señores de Quiroga.

La nave es de planta rectangular, mide 18 m de largo y 7´70 m de ancho. El exterior del templo destaca por su sobriedad constructiva y ornamental. Cuenta con tres portadas destacando la principal, enmarcada por arquivoltas y columnas monolíticas coronadas por capiteles con decoración vegetal. El tímpano contiene una representación de la cruz de Malta, emblema de la Orden Sanjuanista.

El interior del templo vuelve a sorprender por el mármol de su construcción. Es sobrio, pero la luz natural y la artificial hacen que se vean los tonos blanco-azulados de sus paredes y columnas.

En él destaca el Cristo colgado por cadenas en el centro, está clavado por cuatro clavos y no tres como es lo habitual. Realizado en madera, su cara parece estar riendo. También se puede contemplar la tumba de fray Quiroga, un altar en piedra, una talla de la Virgen con el Niño que data del siglo XIV, y una singular crucifixión en piedra y datada del siglo VI.

La iglesia acoge también un arcosolio donde se encuentra el enterramiento de Fray Alonso de Quiroga, comendador del Priorato de Portomarín, cuya figura aparece representada por una escultura bajo la que se han labrado dos escudos y, nuevamente, la cruz de Malta.

Un entorno de gran belleza natural

National Geographic en su artículo destaca el entorno «de gran belleza natural, entre arroyos y riachuelos rodeados por frondosos bosques de ribera y castañares» de la iglesia de San Pedro de Fiz. Es por esto por lo que la prestigiosa publicación recomienda visitar la «la homónima cascada de San Pedro Fiz que cae como un velo de agua en una poza transparente».

Pero además invita al lector a descubrir «encantos de la zona» como la aldea de A Ferreira, de la que destaca «este pueblo de casas de piedra y arroyos de aguas ferruginosas contaba con pequeñas fraguas artesanas y talleres de madera. El enclave, catalogado como Conjunto Etnográfico y Arquitectónico de Galicia, es una etapa de la Ruta do Ferro que discurre por estos municipios de la provincia de Lugo, ensalzando su pasado minero.»