El restaurante con la carta de aguas más extensa del mundo tiene una botella que cuesta 17.500 €

El restaurante con la carta de aguas más extensa del mundo tiene una botella que cuesta 17.500 €Cedida

El restaurante gallego con la carta de aguas más extensa del mundo: «La botella más exclusiva cuesta 17.500 €»

Destaca por su sorprendente selección de más de 170 tipos de agua provenientes de 30 países. Su carta, acreditada por la Fine Water Society, ha convertido a este local en un referente internacional

Galicia, famosa por su diversidad culinaria, alberga una joya poco común: un restaurante que posee la carta de aguas más grande del mundo.

Desde aguas con gas, de manantial, destiladas, hasta aquellas extraídas de icebergs o glaciares, pasando por opciones minerales, carbonatadas e incluso hidrogenadas. Algunas de sus botellas son consideradas auténticas piezas de colección.

Ubicado en el barrio de Valdorregueiro, en las afueras de Orense, este restaurante presume de tener una oferta hídrica sin igual. En España, ya es habitual participar en catas de vino, pero en este rincón gallego, las catas de agua se están convirtiendo en un nuevo fenómeno por descubrir.

Gastronomía gallega con maridaje único

El restaurante O Lar do Leitón ha sabido diferenciarse en el competitivo panorama gastronómico con una propuesta original: una carta de aguas embotelladas que es considerada la más extensa del mundo.

Carlos Crespo y Ana Fernández, propietarios del restaurante, tuvieron claro desde su apertura en 2007 que querían ofrecer algo distinto. «La iniciativa de tener carta de aguas nació en el momento que abrimos el restaurante hace 17 años por ofrecer algo diferente a lo que hubiese en otros locales», comenta Crespo, destacando la importancia del maridaje con aguas en su propuesta gastronómica.

Si bien es cierto que su cocina que destaca por su enfoque en productos locales y platos de temporada como el cochinillo, cabrito, cordero o codillo de cerdo y por sus especialidades tradicionales gallegas como la lamprea, filloas de marisco, bacalao o chuletón de vaca gallega; lo que verdaderamente sorprende a los comensales es la experiencia de poder maridar estos platos con aguas de diversas procedencias y características. Y es que la carta de aguas «ya en si misma un reclamo», nos asegura Carlos.

Mientras algunos buscan la opción más económica de agua en el supermercado, otros eligen reservar mesa en O Lar do Leitón para disfrutar de aguas tan exclusivas como las hidrogenadas o extraídas de icebergs. «La gente que viene aquí a comer puede escoger el agua que quiera.

Aunque como en todo, hay gente que le da igual el agua que le pongas, otra mucha sí que escoge el tipo de agua que quiere según la comida», explica Crespo. Con el tiempo, el lugar ha ganado popularidad, atrayendo a comensales que, en cada visita, prueban nuevas aguas o variedades de distintos países.

Como miembros honoríficos de la Fine Water Society, ofrecen asesoramiento a los clientes sobre la mejor opción de agua para acompañar cada plato.

El menú de aguas, al igual que ocurre con el vino, está diseñado en función del maridaje con los distintos platos. Según las características del plato, como su textura y sabor, se sugieren unas aguas u otras, teniendo en cuenta aspectos como la mineralización, la carbonización o el pH.

«Las aguas maridan al igual que los vinos. Si los primeros platos no son contundentes tipo ensaladas, ensaladilla o champiñones, para estos recomendamos unas aguas de mineralización medio-baja entre 50-500 miligramos. Para platos más contundentes recomendamos un agua con una mineralización alta o muy alta y, si les gusta, con agua con gas», comenta Crespo.

La vuelta al mundo en 200 aguas

La industria del agua se ha hecho un hueco en el mercado de lujo y la carta de aguas del restaurante orensano. El auge del agua queda reflejado en la carta del restaurante, que se organiza en cinco categorías: Atrevida, Tentación, Curiosa, Sutil y Timidez.

Carlos Crespo explica que, a pesar de la aparente simplicidad de esta bebida, «las aguas se diferencian en muchas cosas. Pero principalmente lo hacen en su mineralización y dependiendo de esta se pueden adaptar a los distintos catas. Realmente las aguas se distinguen más por las zonas al igual que los vinos, una agua de Orense si la comparas con la de Eslovenia, cualquiera ya puede notar la diferencia».

Actualmente, O Lar do Leitón ofrece de entre 170 y 180 tipos de agua provenientes de más de treinta países, con referencias que van desde las aguas de iceberg de Canadá y Noruega hasta aguas hidrogenadas y nebulizadas. Aunque esta cifra no tardará en cambiar, pues según revela Crespo: «Estamos trabajando en la nueva carta que sacaremos en las próximas semanas».

Algunas botellas son de diseños exclusivos

Algunas botellas son de diseños exclusivosCedida

«Cada vez más somos conocidos, y tenemos clientes que prueban una agua de un país distinto cada vez que nos visitan», afirma Crespo.

La oferta abarca aguas de más de 30 países, con la última incorporación siendo una variedad de Brasil. En O Lar do Leitón, los comensales pueden viajar a múltiples rincones del mundo sin salir de la ciudad de Ourense.

Si bien es cierto, tal y como asegura Crespo no todas las aguas están disponibles siempre, «hay ciertas aguas que no están disponible todo el año porque su producción es muy limitada como es el caso de la chilena que cuando se acaba hay que esperar a la nueva tirada».

75 cl. a 17.500 €

Aunque la mayoría de las aguas son asequibles para el comensal común, algunas de las más exclusivas están pensadas para un público más selecto.

La carta de aguas de O Lar do Leitón no solo incluye una amplia variedad de opciones, sino también algunas botellas exclusivas que pueden considerarse auténticos objetos de colección. «De esas botellas, la gente puede llevárselas si lo desea, ya que son piezas únicas que no se volverán a producir», comenta Carlos Crespo.

La variedad Bling cuyo precio oscila entre los 180 € y 14.000 €

La variedad Bling cuyo precio oscila entre los 180 € y 14.000 €Cedida

Como por ejemplo, Shahin, de 360 €, inspirada en la halconería cuya botella está inspirada en fina cristalería y contiene agua mineral natural proveniente de los remotos rincones de Irán. O Bling inspirada y desarrollada por Kevin G. Boyd, nace de las montañas humeantes en Dandridge, en Tennessee (Estados Unidos), a una profundidad de 800 metros. La botella Bing cuesta 180 euros, mientras que la Bling Gold Throne es de 14.000 euros.

Pero esta no es la más cara. Este ostentoso título se lo lleva por sus 75 cl de agua a 17.500 €, Fillico, que proviene de las profundidades del subsuelo, al pie del monte Nunobiki, en Kobe (Japón).

Filtrada a través de los años por granito altamente respirable, contiene un equilibrio mineral único con antioxidantes y uno de los mejores contenidos en calcio de todo Japón.

Aunque más allá de la calidad incuestionable del agua su verdadero valor yace en sus botellas: “Es una botella chapada en oro, adornada con cristales de Swarovski, diseñada especialmente para el mercado de lujo", detalla Crespo. Este tipo de producto es muy demandado en mercados internacionales como Dubái o los Emiratos Árabes.

Estas son algunas de las botellas más caras de la carta

Estas son algunas de las botellas más caras de la cartaCedida

Con su enfoque en la calidad del producto gallego y el innovador maridaje con aguas de todo el mundo, O Lar do Leitón ha conseguido crear una experiencia gastronómica sin igual. Un viaje por la gastronomía gallega que, además, permite al comensal recorrer los rincones más remotos del planeta sin salir de Orense con un simple sorbo de agua.

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