Una procesión en ataúdes vestidos como en el funeral; así es una de las festividades más singulares de Galicia
Esta peculiar romería está declarada de interés turístico de Galicia
Las romerías en Galicia son celebraciones populares de carácter religioso que se celebran en diferentes pueblos. La mayoría de estas festividades tienen lugar durante el verano, combinando tradiciones ancestrales, devoción religiosa, y actividades sociales y culturales.
Entre las más peculiares se encuentra la de Santa Marta de Ribarteme, en As Neves (Pontevedra) donde los devotos, vestidos con las ropas que desean llevar en su entierro, son transportados en ataúdes en procesión, como muestra de gratitud por haber sobrevivido a una enfermedad grave.
Declarada fiesta de interés turístico de Galicia, debido a su singularidad y valor cultural, se celebra el 29 de julio y cada año atrae a miles de curiosos.
Ritual de la tradición
La primera referencia histórica de esta celebración data del año 1700, con una mención escrita en la que el Obispo Anselmo Gómez de la Torre solicitó al abad de Ribaterme reparar la capilla original, cuya reforma fue completada en 1722, en la que los romeros veneraban a Santa Marta, patrona de los resucitados y protectora de las almas en el más allá.
Esta peculiar fiesta se caracteriza por su relación con la muerte y la resurrección. Los devotos que tienen una experiencia cercana a la muerte desfilan dentro de los ataúdes simulando su propio funeral. Vestidos como les gustaría ir en su entierro, son cargados en hombros por sus seres queridos mientras recorren las calles del pueblo, para simbolizar una resurrección y agradecer a Santa Marta su intervención.
En ocasiones se suman aquellas personas que padecen alguna enfermedad grave o algún familiar o allegado, para encomendarse a la Santa para que les salve. La procesión es seguida por otros penitentes que prefieren no ser transportados en ataúdes. En su lugar se cubren sus ropas con una gasa blanca y caminan portando una vela tras la imagen de la Santa.
El día de la romería los devotos empiezan a cumplir sus promesas asistiendo a los oficios religiosos desde primeras horas de la mañana. A medida que avanza el día, comienzan a llegar los ofrecidos amortajados, portando cirios y a su lado los ataúdes en los que procesionarán más tarde.
La procesión presidida por la imagen de Santa Marta tiene lugar al mediodía y los devotos la siguen de rodillas, descalzos o metidos en ataúdes.
La peculiaridad de esta procesión hace que, cada año, muchos medios de comunicación tanto nacionales como internacionales se acerquen a la localidad pontevedresa. Incluso el periódico británico 'The Guardian' calificó en su momento, esta celebración como una de las fiestas más raras del mundo.