El conde de Torres Cabrera: un personaje por descubrir
Clemente Fernández de Córdova publica un libro sobre el legado de Ricardo Martel
El apellido Fernández de Córdova ha jugado «un papel importantísimo no sólo en Córdoba sino en España a lo largo de los siglos», como ha destacado el editor Manuel Pimentel en la presentación ayer de 'Orígenes de los Fernández de Córdova' en el Real Círculo de la Amistad. En este libro no sólo se aportan los orígenes del linaje, sino que se arroja luz sobre diversos episodios, ocurridos en el siglo XIX y comienzos del XX, de los que han llegado a nuestros días unas versiones distorsionadas.
El autor, Clemente Fernández de Córdova, se centra en la figura de Ricardo Martel, conde de Torres Cabrera, del que ha afirmado Pimentel que «tuvo una vida apasionante, fue un prohombre de Córdoba que merece ser rescatado». Esto es, precisamente, lo que se aporta con esta publicación, en la que no sólo hay una detallada biografía del protagonista, sino que se reconstruye en base a documentación primaria algunos de los pleitos en los que se vio inmerso.
«Una persona muy intrépida»
La historiadora Virginia Luque ha participado en la presentación y ha calificado al conde de Torres Cabrera como «un adelantado a su tiempo, una persona muy intrépida, muy culta y muy comprometida con la sociedad cordobesa». Sobre esto, Clemente Fernández de Córdova ha señalado que en sus periodos al frente de la alcaldía de la ciudad se preocupó de mejorar el abastecimiento de agua potable, de actualizar el alumbrado viario, así como de garantizar la calidad de los productos alimenticios que se vendían en los mercados.
Este compromiso le llevó, además, a poner en marcha la Colonia Santa Isabel, en Alcolea, pionera en lo social y en lo agrícola; a liderar el Partido Conservador, a crear el diario La Lealtad, a poner en marcha infinidad de iniciativas que no tenían otro objetivo que beneficiar a la sociedad. Este compromiso le llevo a ser alcalde varias veces, gobernador civil, diputado y senador vitalicio sin desatender sus actividades empresariales. Además, abrió las puertas de su casa para que Alfonso XII durmiera una noche en Córdoba.
El libro aborda también el largo pleito por la Fundación de Santa María de los Huérfanos, aún activa aunque desviada de la voluntad de su fundador, don Lope Gutiérrez de los Ríos, y el denominado pleito de Viana frente a la Casa de Villaseca.