Sucesos
Un policía local pierde el control de su coche y arrolla a cinco personas durante una procesión en Alcobendas (Madrid)
El agente fue sometido a pruebas de detección de drogas y alcohol, que dieron negativo
Un coche de la Policía local de Alcobendas atropelló la tarde del pasado 25 de diciembre a varias personas durante una procesión de la Virgen de La Paz, dejando cinco heridos de carácter leve.
El policía que conducía el vehículo fue sometido a pruebas de detección de drogas y alcohol que dieron negativo en todos los casos, según ha confirmado el alcalde de Alcobendas, Aitor Retolaza.
El incidente tuvo lugar durante el traslado de la Virgen de la Paz que tradicionalmente se realiza la tarde del 25 de diciembre, cuando se lleva en procesión la imagen de la patrona desde la parroquia de Alcobendas hasta la iglesia de San Pedro, en el centro histórico, con motivo de la fiesta de la Virgen, que se celebra el 24 de enero.
Retolaza explica que el suceso se produjo a mitad de la procesión, en el paseo de la Ermita, aparentemente tras un error del agente que conducía el coche oficial, según las primeras investigaciones.
A su juicio, el motivo pudo ser que el hombre se equivocara de pedal de freno y «arrollase y atropellase a varias personas», entre las que no estaba el propio alcalde, que se salvó “por poco, porque por suerte o por reflejos" pudo apartarse.
«Por suerte y gracias a la Virgen no lamentamos ningún herido grave», apostilla el primer edil, que reconoce que «hubo momentos de muchísima tensión y la gente se esperaba lo peor».
Pero, finalmente, los heridos fueron leves y solo tres tuvieron que ser trasladados al hospital, de los que dos recibieron el alta el mismo 25 de diciembre y otro tuvo que pasar la noche en el centro sanitario.
La procesión continuó su marcha hasta la iglesia, especialmente la parte delantera, con las decenas de personas que iban antes de la Virgen.
El Ayuntamiento de Alcobendas ha publicado en redes sociales un tuit en el que «lamenta profundamente el accidente ocurrido», subraya que las primeras investigaciones «apuntan a un error en la conducción», y recalca que el agente implicado dio negativo en las pruebas de drogas y alcohol.