(Un hombre entre las lápidas del cementerio de San Isidro

(Un hombre entre las lápidas del cementerio de San IsidroEuropa Press

Ayuntamiento de Madrid

Vox propone a Almeida habilitar espacios en todos los cementerios de Madrid para enterrar a bebés concebidos no nacidos

El grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Madrid han registrado una proposición para pedir al alcalde, José Luis Martínez-Almeida, habilitar en todos los cementerios de la ciudad «un espacio adecuado para poder sepultar, en suelo o en pared, o depositar las cenizas de bebés concebidos que, tristemente, no han podido nacer, en condiciones que garanticen la máxima dignidad y asequibles para cualquier persona».

La concejal Carla Toscano firma la iniciativa, a la que ha tenido acceso El Debate, en la que recuerda que en el cementerio de Boadilla del Monte existe ya un espacio para niños no nacidos y neonatos y que en el cementerio Sacramental San Lorenzo y San José también existe una sepultura para enterar a bebés concebidos, pero nacidos sin vida. Así, reclama que sean todos los cementerios municipales de Madrid los que tengan habilitados estos espacios.

Además, señala que en otras ciudades como Valencia o Zamora, y en el extranjero, como Florencia, Roma o Hue (Vietnam) existen lugares parecidos. «Muchas madres y padres que pierden a sus hijos antes de nacer, por cualquier circunstancia, pueden necesitar el sosiego y la paz interior de que sus restos descanses en un lugar digno y adecuado», subraya Toscano en la proposición.

La concejal indica que desde su grupo municipal siempre han defendido «la dignidad de cada persona desde su concepción hasta su muerte», por lo que consideran que las personas «concebidas, pero no nacidas, deben ser enterradas con la dignidad que merecen».

El texto hace mención a la sentencia del Tribunal Constitucional 11/2016, de 1 de febrero, que resolvió el recurso de amparo promovido por una madre a quien denegaron la licencia de incineración de los restos resultantes del aborto padecido. «La madre pretendía poderse despedir del feto con su pareja y poder incinerarlo después para darle digna sepultura en una ceremonia de carácter civil y familiar. La demandante no alegó razones religiosas ni confesionales, pero la sentencia avaló su derecho protegiendo sus convicciones personales con independencia de su origen ideológico o religioso», expone.

«Cada vez más profesionales tratan de visibilizar el denominado 'duelo gestacional y perinatal', que es el que se produce tras la pérdida de un embarazo, que hasta ahora se ocultaba o no se tenía en cuenta. También algunos hospitales tienen protocolos para ayudar a las mujeres y familias en estas circunstancias», indica.

Desde Vox explican que «entre el 10 y el 25 % de mujeres sufren un aborto espontáneo» y lamentan que «el dolor de la madre, y también del padre, ante la pérdida de un bebé, se ve incrementado por la dificultad para poder despedirlo». En este sentido, Toscano comenta que, además, «los bebés nonatos que no han superado la semana 22, pasan a ser tratados como material biosanitario».

Además, «solo en España, han abortado de forma voluntaria alrededor de 100.000 mujeres de media al año desde que, lamentablemente, entrase en vigor la actual ley de plazos de 2010, que permite la interrupción libre del embarazo hasta la semana 14 de gestación, provocando, según los expertos, unas secuelas postaborto que se ven reflejadas en reacciones físicas, psicológicas, emocionales y relacionales». «Solo el año pasado se produjeron más de 103.000 abortos, de los cuales el 94 % fue a petición de la mujer», lamentan desde Vox.

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