Siete vinos de Rioja Oriental para celebrar un fin de semana de tradición y humo en torno a San Andrés

En la Rioja Oriental, conocida como Rioja Baja hasta no hace mucho, las tradiciones y el clima suponen una extra y aportan un carácter único a cada uno de los vinos que se elaboran en la zona. Un clima un poco más cálido y algo más seco junto a una altitud media hacen que los municipios que engloban esta parte de la D.O. Ca. Rioja tengan unas condiciones excepcionales para variedades como la Garnacha, Graciano y Tempranillo.

A lo largo de este fin semana el turismo se centraliza en uno de los pueblos más reconocidos desde el sector. La celebración de la Procesión del Humo en torno a San Andrés en la localidad de Arnedillo reúne a cientos de turistas y devotos que seguro que podrán darse una vuelta por la zona para poder descubrir también los vinos de las localidades cercanas.

La tradición toma las calles de este municipio reconocido por su balneario, en el que cada año el último fin de semana de noviembre se quema romero y el humo apoca las calles de la localidad al paso de la procesión de San Andrés. La devoción de los cofrades se extiende por la geografía española, muchos de ellos vuelven a sus orígenes, en una fiesta declarada ya de Interés Turístico Regional desde 2013.

Esta zona se sitúa en el límite oriental de la denominación de origen, es la cuna de vinos elaborados con tradición y devoción del conocimiento ancestral, en los que el terreno y las temperaturas les aportan gran cuerpo y frescura.

En Rioja Oriental, una de las variedades que más se utilizan para sus vinos es la Garnacha. Esta uva se adapta de forma extraordinaria a las condiciones de la zona y ofrece vinos estupendos. Con la herencia generosa recibida en forma de viñas históricas y de un conocimiento que sólo nace de la experiencia, Mariluz Ruiz y Javier Rubio fundaron Viñedos Real Rubio. Su vino Crianza Garnacha es un monovarietal que se elabora a partir de una vendimia realizada en la emblemática Finca el Tordillo.

Viñedos de más de 35 años y con poca producción para crear un vino de guarda con 14 meses en barricas de roble francés y americano.

Algunas bodegas de la zona crecieron y se ubicaron en otras zonas. Es el caso de Bodegas Ontañón, originarias de la localidad de Quel. Estas bodegas tienen unas instalaciones de las que hablé hace unas semanas en la propia ciudad de Logroño. De hecho, está dentro del grupo que así se hace llamar, Bodegas de Logroño. Este grupo tiene ganado su reconocimiento por haberse convertido en uno de los grandes proveedores de vinos de una de las principales marcas de supermercados en España. Su vino Antología es fruto de un minucioso trabajo con una rigurosa selección de una decena de parcelas excepcionales de la Sierra de Yerga en las que se cultivan Tempranillo, Garnacha y Graciano. Las tres almas de un vino innovador que puede ser una elección perfecta para un brindis en honor a San Andrés.

Hay localidades distribuidas por la geografía española que no representan lo que intentan trasladarnos sus nombres. Este el caso de Aldeanueva del Ebro, identificada por ser el municipio de las tres mentiras. Ni es aldea, ni es nueva, ni pasa el Ebro. Ahora bien, es el municipio de España con mayor volumen de viñedo en relación a su término municipal. Aquí se establecen un gran número de bodegas. Ee el caso de Bodegas Viña Herminia, que produce este vino Excelsus a partir de una selección de Tempranillo y Garnacha. El Excelsus tiene un perfil de frutas negras, chocolate y un toque especiado que resalta la calidez de la Rioja Oriental.

La historia de las bodegas de esta zona se encuentra alineada con sus raíces. A finales del siglo XIX, don Joaquín Garralda y Oñate, Marqués de Reinosa y Conde de Autol, comenzó a elaborar sus vinos. Bodegas Marqués de Reinosa, ubicada en Autol, elabora Marqués de Reinosa Reserva Garnacha Tinta. Un vino con color intenso de esa Sierra de Yerga que tanto ofrece a las bodegas. Un vino que refleja la calidad de esta variedad en la zona y es ideal para acompañar una comida en noviembre.

En este mismo sentido recojo el vino La Mateo Garnacha cepas viejas 2018, un monovarietal de Garnacha de Bodegas d. Mateos en Aldeanueva de Ebro es una expresión auténtica de la variedad y el clima. Además, este vino es casi un vino «indultado» porque está elaborado a partir de uva Garnacha proveniente de viñedos centenarios plantados en vaso en las laderas del monte de Yerga. Esta viña fue indultada por Mateo Ruiz aun a sabiendas de que daba un rendimiento mínimo, eso sí, con la confianza de que por sí sola podía hacer un vino excepcional.

Uno de los vinos caracterizado como de viñedo singular que recojo entre esta selección es El Cerro de San Miguel de Paco García. Un vino 100% Tempranillo de un viñedo plantado en 1981 y localizado sobre una pequeña loma en el municipio de Murillo de Rio Leza. El Cerro de San Miguel es uno de los mejores viñedos de la familia y heredado del abuelo de Juan Bautista. Un vino donde la tierra es importante y la uva es la protagonista.

Con la mirada puesta en el viñedo, en la tierra y en lo que esta ofrece, la finca 17 de Venta Jalón fue plantada hace 20 años en suelo franco arcilloso con presencia de cantos rodados. Bodegas Rioja Vega, fundada en 1882 es una de las pocas empresas que incorporan el nombre Rioja, porque es anterior a la fundación de la propia Denominación de Origen. El vino Venta Jalón tiene una presencia imponente y aromas profundos. Un vino para gente inquieta, amante de los sabores identitarios, que te vinculan con las sensaciones de un entorno particular.

Aunque si de historia del vino hablamos podríamos viajar a tiempos de los romanos. Aradon fue una villa que existió desde tiempos romanos y que misteriosamente desapareció. Aradon se situaba en un plano a 550 m de altitud llamado «La Mesa» ocupado actualmente por viñedos de hasta 90 años de edad, propiedad de la marca con la que los viticultores de Alcanadre quisieron rendir homenaje a ese poblado. La villa de Aradon se situaba cerca de varias calzadas romanas y de un acueducto romano del siglo I D.C, llamado «Puente Moros». Con uvas provenientes de viñedos muy antiguos, de más de 85 años, se elaboran vinos como Arandon la Garnacha Prometida.

Fincas de Azabache es un vino está elaborado con una selección especial de viñas viejas situadas en la sierra de Yerga de la variedad Garnacha. Un vino con una marca que hace referencia al edificio, casi construido para este vino. Un lugar propio donde aprovechar toda su experiencia y tradición desde 1956 para elaborar vinos contemporáneos. Un nuevo concepto de bodega para la elaboración de este vino 100% Garnacha con todo el sentido por la tierra.

Volviendo a la población más cercana a Arnedillo que cuenta con bodegas elaboradoras grandes, en Arnedo, Bodegas Faustino Rivero Ulecia es la bodega originaria del Grupo Marqués del Atrio y celebra este año su 125 aniversario. Su vino de Vendimia Seleccionada se elabora con Tempranillo y Garnacha. Los viñedos de Tempranillo próximos al entorno de la Sierra de Yerga, dentro de la comarca de Cervera, con una altitud media de 700m, ubicados en localidades como Rincón de Olivedo o Grávalos. Para los tintos destinados a envejecer en barrica, intervienen viñedos de la zona de Cabretón, destacados por su altitud, que permiten uva con muy buena acidez y gran longevidad. La Garnacha, proviene en gran parte de Rioja Alta, donde trabajamos con viñedos en la comarca de Nájera, próximos a Alesanco, donde se obtiene una uva de maduración más tardía bajo unas condiciones frescas.

Atraídos por la procesión del Humo en honor a San Andrés como telón de fondo, estos vinos se convierten en el compañero perfecto para la celebración, uniendo tradición, sabor y el inconfundible carácter de la Rioja Oriental.

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