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La costa amalfitana, en el sur de Nápoles

La costa amalfitana, en el sur de Nápoles

Así es cómo se puede encontrar vuelos baratos

El ahorro es tal que por el precio que se gastaba antes en un viaje se pueden hacer tres o cuatro

Los precios de los billetes de avión cambian drásticamente desde el momento en que se ponen a la venta hasta el mismo día de la salida del vuelo, por lo que es importante planificar el viaje con anticipación. Los expertos explican que las tarifas áreas pueden cambiar hasta diez veces a lo largo de un día.

Los cambios en los precios de los billetes varía en función de cuántos asientos se han reservado en un vuelo y cuántos se reservaron el año anterior y cuáles fueron los precios.

Para conseguir los mejores precios en vuelos nacionales, hay que empezar a mirar los billetes entre uno y tres meses antes de la salida. En cambio, si se trata de un vuelo internacional, los billetes más baratos los vamos a encontrar entre los dos y los ocho meses previos al viaje.

Otro punto a favor es la flexibilidad. Coger un avión un martes o un miércoles en lugar de jueves o viernes, resulta más barato porque son días en los que las aerolíneas tienen menor actividad.

También es útil ser flexible con el lugar de destino. Tradicionalmente, solemos decidir a dónde queremos ir y cuándo. A partir de ahí, miramos los vuelos, por lo que no es de extrañar que terminemos con billetes bastante caros.

Viaducto de Glenfinnan, en Reino Unido

Viaducto de Glenfinnan, en Reino Unido

Para ahorrar dinero, hay que darle la vuelta a ese proceso. Primero, buscar los vuelos baratos desde nuestro aeropuerto de origen. De esos destinos, hay que elegir cuál es el más interesante. Por último, escoger las fechas que mejor se ajusten a nuestro horario.

Al establecer los precios como la máxima prioridad, terminas consiguiendo vuelos realmente baratos. Esto te permite hacer tres o cuatro viajes por el mismo precio que solías pagar por uno.

No hay que olvidar que el precio de un vuelo cambia después de buscarlo varias veces en un mismo navegador web. Por culpa de las cookies del navegador, los precios de los vuelos crecen cuando se busca repetidamente una ruta en particular. Esto es así porque la página web en cuestión quiere asustar al usuario para que reserve el vuelo rápidamente antes de que los precios suban aún más. Lo mejor es buscar los vuelos siempre en modo incógnito o de navegación privada para ver los precios más bajos.

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