Iñaki Urdangarin y su madre Claire Liebaert, en una imagen de archivo
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El motivo por el que Urdangarin vive con su madre y no con Ainhoa Armentia
La pareja no parece decidida a dar el paso de compartir vivienda en Vitoria
Los caminos laborales de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia vuelven a unirse. El pasado miércoles saltaba la noticia de que el exduque de Palma había conseguido un nuevo trabajo en la misma empresa en la que trabaja su pareja. Desde ahora, forma parte de la plantilla de 22 personas de una constructora que opera desde hace 43 años en el sector de la construcción de carreteras y autopistas, según especifica en la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE).
Aunque forman parte de la misma empresa trabajan en departamentos diferentes. Ella se encarga de atender a los proveedores y gestionar el funcionamiento de la entidad, mientras que él permanece en la oficina en un puesto de no responsabilidad. Lo bueno de que ambos trabajen en el mismo lugar es que siempre aprovechan para compartir también su horario de salida y aprovechar el afterwork para desconectar y descansar antes de regresar a sus respectivas viviendas.
Porque sí, de momento, no viven juntos. Ainhoa, tras separarse, se instaló en una casa junto a los hijos nacidos de su matrimonio, mientras que Iñaki sigue viviendo en casa de su madre en Vitoria, a donde se trasladó cuando se le concedió el tercer grado al salir de prisión.
La colaboradora de Vamos a ver Sandra Aladro apuntó que el principal motivo por el que no se hayan animado a irse a vivir juntos es el divorcio sin formalizar con la Infanta Cristina. «Es la traba para dar ese paso», explica, al mismo tiempo que afirma que cuando se lleven a cabo todos los trámites que faltan tanto uno como otro estarán preparados para buscar un piso en común.
Iñaki Urdangarin en una imagen de archivo
Aladro descarta, así, los rumores de posible crisis que asolaba sobre la pareja en los últimos meses. Desde que su relación salió a la luz en enero de 2022, nunca la han escondido y el hecho de que no hubiera imágenes de ellos pasando el verano juntos hacía presagiar lo peor. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. «Son muy felices en Vitoria, no me consta que tengan pensando dejar la ciudad. Viven muy tranquilos, muy a gusto, son dos vecinos más y nadie les molesta».
La periodista también ha detallado su rutina en el día a día. «Él va con su portátil y su termino, llega a las 9:00 y pasa pocas horas allí, el dueño de la empresa es un vecino de Iñaki... es posible que lo esté ayudando en su futuro laboral». Cuenta, además, que este nuevo trabajo es pasajero: «Él está enfocado en volver al mundo del deporte, al couching y ahora le están echando una mano».
«Por las horas que Urdangarin está, lo que se le ve hacer, no se ve que sea un trabajo de gran responsabilidad ni el trabajo de sus sueños», comentaba la periodista ante la mirada de sus compañeros de Telecinco.
De momento la figura que desempeña un papel clave en la vida familiar de los Urdangarin no es otra que Claire Liebaert. A lo largo de este tiempo mucho se ha especulado sobre la relación de ésta con Ainhoa Armentia y, pese a que se empeña en dejar claro que no la conoce, hay informaciones que apuntan a que es una más en el clan Urdangarin. «A pesar de lo que diga se conocen mucho y entra en esa casa. La madre de Iñaki tiene mucho cariño a la Infanta pero también quiere a su hijo y no ha tenido más remedio que aceptarla en su vida», remata Aladro, que opina que en la negativa pública de Claire se esconde la profunda lealtad que sigue sintiendo hacia la Casa Real.
