Santi Serra, el hombre que le susurra a Victoria Federica

Santi Serra coincide con Victoria Federica en sus gustos por ir a la moda «soy un fan de la moda y me gusta vestir a la última y a ella todo lo que se pone le queda súper bien» y también coincide con la aristocrática influencer en su amor por los caballos «Victoria es muy, pero muy buena montando a caballo».

Santi tiene 124 mil seguidores en Instagram y la sobrina del Rey Felipe casi le dobla, pero de casta le viene al galgo y cuando Vic quiso hacer su puesta de largo en las revistas de salseo, en julio del año pasado, llamó a Serra y le propuso que susurrasen juntos a los caballos y eso hicieron urbi et orbe desde Gerona.

Santi Serra es íntimo de Maluma y con él viaja en su avión privado o montan juntos a caballo por el Rocío. También comparte ratitos con Cayetano Martínez de Irujo o se codea con Marta Ortega y su padre, a los que se refiere como Amancio y Marta, un trato como de estar en casa en zapatillas.

Y es que así es la vida de Santi un hombre que es más caballo que humano o al menos lo intenta. Desde los 14 años que comenzó a ganar unas pesetas como animador en los rodeos hasta ahora, ha recorrido el mundo entero con sus caballos, perros y halcones. Su espectáculo de animales en libertad tiene tal éxito, que en la edición 33 del Salón Internacional del Caballo Español, SICAB, recibe el premio PRE por ser amigo de los caballos.

–¿Le hubiese gustado que el premio se lo entregase su amiga Victoria Federica?

–Los premios siempre son especiales, indiferentemente de las manos que lo entregan. Siempre son un reconocimiento a un esfuerzo grande que hay detrás de cada salida a pista.

–¿Cuándo pasa las aduanas cómo explica su profesión?

–Digo que juego con los animales, je, je. La verdad es que me miran un poco mal pero yo les enseño unas fotos y lo entienden. Soy un artista ecuestre que recorre el mundo con sus caballos.

–Ayer estaba en Arteixo con Marta Ortega. ¿Le susurra a los caballos de la presidenta de Inditex?

–Sí, vengo de Caixas Novas de casa de Amancio y de Marta. Les conozco desde hace muchos años. No hablo con los caballos de Marta porque hablo con los míos, pero podría porque tiene magníficos ejemplares. Ella es un encanto de mujer y me siento como en casa en Arteixo.

–Hay que ser raro para cambiar una novia estupenda por un guepardo.

–Los animales son mi familia y no los cambio por nada. El guepardo dormía conmigo y cogía mucho espacio en la cama porque se movía bastante y mi novia no se adaptaba y claro, lo siento mucho, pero lo primero son los animales. Tres en una pareja no es fácil de entender y yo lo que trato es de ser un animal más. Mi lema es «No hagas que el caballo se transforme en humano, sino que el humano se transforme en caballo para poder hablar su mismo idioma».

–Quizás, Victoria Federica le entiende mejor y en el reportaje que hicieron juntos se notaba que había química.

–Ostras, eso fue muy chulo. Me llamó Victoria por si podían hacer un reportaje en casa y yo tenía muchas ganas de hacer un tipo de editorial de moda así como resultó, juntando los caballos y la moda porque sabía que con Victoria quedaría fabuloso porque ella es un encanto. Victoria es una crack, la moda la lleva súper bien y todo lo que se pone le queda estupendamente.

–¿Y por qué no sigue montando?

–Eso no lo sé nunca lo hemos hablado pero en la Feria estuvimos montando juntos y es muy, muy buena amazona.

–¿Cómo llega Victoria Federica a ti?

–Pues fue hace muchos años. Conozco a su madre desde hace muchísimo, tenemos muy buena relación. Ellas vinieron a verme a un espectáculo y desde entonces cogimos una relación muy buena y hablamos muchísimo.

–Han venido a casa y son una familia maravillosa.

–¿Con qué animal asocia a Victoria Federica? Con un halcón porque es muy libre y siempre quiere volar.

–¿Y a la infanta Elena?

–Ella es un encanto de persona y creo que sería como un caballo, que es majestuoso y cuando lo ves impacta a todo el mundo, como ella.