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Las claves del nuevo rostro de Alfonso Díez
El viudo de la duquesa de Alba ha reaparecido en el funeral de Ira de Fürstenberg en Madrid, donde ha sorprendido por sus operaciones estéticas
Tras su retiro a causa de la pérdida de su mujer, Cayetana Fitz-James Stuart, la duquesa de Alba, en noviembre del año 2014, Alfonso Díez se ha dejado ver en contadas ocasiones. Ahora llena de nuevo las páginas en los medios de comunión por haber reaparecido con una nueva expresión facial, mucho más rejuvenecida.
El médico ha borrado las sombras del envejecimiento de su rostro, y ha echado mano de la medicina estética para recobrar la juventud del rostro con resultados más que evidentes. Así, Alfonso ha recuperado los volúmenes y la armonía de la juventud y unas facciones que han cambiado por completo. Nadie diría que tiene 73 años.
El nuevo rostro del viudo de la duquesa de Alba evidencia algunos cambios muy notables en el tercio medio e inferior del rostro. Desde el programa de Antena 3, Y ahora Sonsoles, se hacían eco de su tremendo cambio físico. Lo primero que sorprende en la nueva cara de Díez es el aspecto de su piel en la que no hay ni una sola arruga, además de estar muy luminosa y sin rastro de flacidez.
En sus ojos tampoco hay patas de gallo, ni el hundimiento típico que aparece a partir de los 50 años. Para lograr una frente libre de arrugas y la mirada abierta, alegre, juvenil, además de inyectarse toxina botulínica podría haber necesitado relleno a nivel temporal con ácido hialurónico. Para eliminar la flacidez, en la zona media del rostro, se habría trabajado el pómulo a nivel distal para darle volumen y proyección, también con ácido hialurónico. Lo cierto es que todos los colaboradores estaban de acuerdo en que, ahora, luce un rostro más perfilado y estilizado.
Otro de los cambios más evidentes del que han hablado en el programa es el cambio en su nariz. En las fotos del antes detectamos una punta nasal caída y un tabique más alargado en comparación con las imágenes más actuales. Esto lo podría haber conseguido con una cirugía o con una rinomodelación. La segunda intervención es un tratamiento médico estético menos invasivo que permite reparar desviaciones del perfil nasal, estrechar el puente de la nariz, y elevar la punta.
Estos tratamientos estéticos han conseguido acentuar sus rasgos, pero, además, también se aprecia una piel perfecta. ¿Cuál es el truco? Para no tener imperfecciones podría haber recurrido a una combinación de algún láser para regenerar la piel de forma integral, eliminando imperfecciones, minimizando poros, unificando el tono, es decir, como un reseteo de la piel. Y lo habría combinado con tratamientos faciales para dar hidratación profunda y luminosidad.
Unos cambios físicos que no han dejado indiferente a nadie. «Yo, cuando vi a Alfonso, me impactó«, decía Beatriz Cortázar, que comentó que también se había operado de cataratas. Pero al parecer la afición de Díez por los retoques no viene de ahora. «Cayetana era la que le animaba a hacerse cosas», confesaba la periodista.
Sin embargo, no todos los colaboradores del espacio aprobaban su cambio: «Yo no sé quién se lo ha hecho, pero el rostro es más femenino que masculino», opinaba Pilar Vidal. Por su parte, Sonsoles Ónega añadía: «¡Se ha hecho un desaguisao! Absolutamente. Ni Andy Warhol ni nada. Se ha puesto morritos, se ha subido la nariz…». Sea como fuere, el duque viudo de Alba de Tormes parece más enfocado en disfrutar de su vida privada.
Este año, además, se cumple el décimo aniversario del fallecimiento de la duquesa de Alba. De momento vive alejado del foco mediático, aunque siempre que aparece en un evento se hace alusiones a posibles cambios estéticos. Hace unos años, se generaron algunos rumores que señalaban que se había sometido a distintas intervenciones quirúrgicas, entre las que sonaban con fuerza los rellenos faciales y la blefaroplastia, la cual se realiza para eliminar el exceso de piel sobrante de los párpados.