Las Campos, una dinastía televisiva muy rentable

María Teresa Campos era un genio. En su velatorio en el tanatorio madrileño de Tres Cantos, hace ahora un año, las muestras de dolor y de respeto fueron infinitas. Falleció el pasado 5 de septiembre de 2023.

Personalidades y personajes de gran relevancia acudieron a dar el último adiós a la gran comunicadora televisiva de los últimos tiempos.

Murió disgustada con el medio —la televisión— que le dio la gloria, la fama y el dinero. Durante décadas lideró la audiencia de los espacios televisivos de información y entretenimiento que caían en sus manos. Sus dos hijas, casi siempre a su vera.

En la televisión

Carmen como directora y Terelu como presentadora y colaboradora. Teresa murió suplicando un trabajo en la televisión. Se resistía a quedarse en casa como una octogenaria jubilada. Y se lamentaba de que no hubiese un hueco para ella en la parrilla de la pequeña pantalla. ‘María Teresa Campos, a su manera’, un documental emitido en La 1 de RTVE y dirigido Carmen Borrego, recogía hace dos días precisamente esa queja de la popular comunicadora.

Fue una gran estrella que se apagó poco a poco y que no lo supo llevar bien del todo. Dejó un gran legado profesional. Sus dos hijas y su nieta Alejandra a día de hoy triunfan y ganan mucho dinero trabajando en televisión, siguiendo sus pasos, aunque con diferentes perfiles.

Tanto Terelu como Carmen son tertulianas de espacios televisivos con grandes audiencias en Telecinco. Cuentan sus vivencias y comentan las de otros personajes. Son comunicadoras y generan noticias, especialmente de su propia familia, que da mucho juego. Una familia que en un año sin La Campos se ha dado la vuelta.

Justamente cuando se cumple el primer aniversario del fallecimiento de la matriarca, los jóvenes del clan tienen muchas novedades en sus vidas. Novedades que comparten con el público fiel que consume muchas horas de televisión. Su nieta, Alejandra Rubio, espera un bebé con el hijo de Mar Flores, Carlo Costanzia. Un bebé que trae alguna que otra exclusiva pagada bajo el brazo. El embarazo se dio a conocer en una portada de Hola. Dicen que cobraron más de 80 mil euros por dar la noticia que convierte a Terelu y a Mar Flores en abuelas condenadas a entenderse.

Este viernes noche ambas hijas van al plató de Telecinco, a De Viernes, donde comentarán el aniversario de la muerte de su madre y otras patatas calientes que tienen entre manos, como la mala relación de Carmen con su hijo José María, quien también trabaja en Telecinco, por cierto y las pegas que le pone la nuera para ver a su pequeño nieto. La familia suma y sigue generando noticias y polémicas entre ellos. Y generando ingresos económicos.

Y seguramente en esta nueva entrega televisiva aparecerá en escena el nombre de Paola, la nuera de Carmen Borrego y madre de su único nieto, un nuevo personaje de la saga Campos que dice cosas poco agradables de la hija pequeña de Teresa Campos. Están todos, —o casi— desavenidos, o al menos eso parece. La muerte de María Teresa ha desperdigado a gran parte de la familia. Una familia, un clan, que en televisión están tan presentes o más de lo que estuvo su madre, la gran estrella de la pequeña pantalla a lo largo de una vida. Y la gran comunicadora que murió en silencio.

La carta

«Un año ya… Un tiempo que ha sido como un suspiro, pero un suspiro largo, profundo. Un año invadido por la tristeza. Por esa inmensa soledad que es saber que ella no está a la vuelta de cualquier esquina, de cualquier llamada, de cualquier impagable, y hoy añorada, y siempre reconfortante mirada… Un año, en fin, sin mi madre. Sí, cuesta decirlo, pero ahora, al menos, ya sé medir, a partes iguales, el vacío y la ausencia. Y por supuesto, el inmenso dolor. Pero hay algo imborrable: los recuerdos. Esos están todos en su sitio. En la memoria permanece indeleble todo lo vivido a su lado. Cada cosa de cada momento y de cada lugar y de cada una de tus palabras, están como tú las dejaste mamá. Y mientras sea así, tú no te irás nunca. Nunca», escribía su hija Carmen Borrego en una bonita carta, a modo de homenaje, publicada en Vanitatis.