Carla Goyanes, en el funeral de su hermana Caritina
Lo único que consuela a Carla Goyanes tras la muerte de su padre y su hermana
A través de su perfil en Instagram, ha compartido una imagen que brilla con ternura y esperanza
El mes de agosto supuso un duro golpe para la familia Goyanes-Lapique. El 7 de agosto, Carlos Goyanes murió dejando un vacío profundo en el corazón de sus seres queridos. El dolor por su pérdida aún resonaba en cada rincón de la familia cuando la tragedia se ensañó de nuevo con la inesperada muerte de Caritina Goyanes. Con solo 46 años, Caritina falleció a causa de un infarto de miocardio en su hogar de Marbella el 26 de agosto, sumiendo aún más en el sufrimiento a sus familiares, que aún no lograban asimilar la magnitud de la pérdida.
En medio de esta tormenta de tristeza, Carla Goyanes se convirtió en el centro de la atención pública. Su dolor era palpable y desgarrador. En un conmovedor acto de despedida a Caritina, compartió en Instagram un mensaje sincero y lleno de sentimiento. «Nos faltaba mucho por hacer. Todavía no me creo que no vayamos a hablar más, ni abrazarnos, ni consolarnos, ni disfrutar más de la vida juntas con nuestros hijos,» escribía Carla, reflejando la tristeza y la incredulidad ante la realidad de una vida sin su hermana «única».
La despedida de Caritina en el cementerio de San Isidro, donde sus restos descansan al lado de los de su padre, fue un momento de profundo dolor. Tras esta dolorosa despedida, la familia se refugió en la finca de Retuerta de Bullaque, en Ciudad Real. En ese rincón de calma, buscaban encontrar consuelo y fortaleza en su unidad, enfrentando el inmenso vacío dejado por los que se han ido.
Carla Goyanes, Miriam Lapique y Cari Lapique
Pero la vida sigue y con el inicio de septiembre, la familia Goyanes-Lapique enfrenta un nuevo desafío: retomar sus rutinas y ver a los niños volver al colegio, en medio de un mar de dolor y pérdida. La profunda tristeza que embarga a Carla Goyanes, tras perder a su hermana y a su padre en un corto intervalo, no ha sido fácil de sobrellevar. Sin embargo, en medio de este inmenso sufrimiento, encuentra un rayo de luz en la alegría y la inocencia de sus tres hijos: Carlos, Santi y Beltrán, frutos de su amor con Jorge Benguria.
A través de su perfil en Instagram, ha compartido una imagen que brilla con ternura y esperanza: sus hijos en su primer día de colegio, vestidos con sus uniformes y llenos de sonrisas, una visión de pureza y alegría en contraste con el dolor que la rodea. «Verles sonreír es la mejor medicina» escribe Carla, capturando cómo la risa y la vitalidad de sus pequeños se convierten en un bálsamo para su herido corazón. La publicación ha sido recibida con una avalancha de apoyo en las redes sociales, donde su madre Cari Lapique y Paloma Cuevas han enviado mensajes cargados de cariño, corazones y palabras de aliento.
La información llega apenas unos días después de conocer el continuo éxito de Sixsens, el catering fundado por Caritina Goyanes. Este logro no solo es un tributo a la visión y el esfuerzo de Caritina, sino que también actúa como un faro de esperanza en medio de la adversidad. Por otro lado, el próximo 23 de septiembre, la familia se reunirá para una misa funeral en honor a Carlos y Caritina Goyanes. La ceremonia, que se celebrará en la iglesia de San Agustín, en la exclusiva colonia del Viso de Madrid.
